Viernes 26 de Julio de 2024

Dos condenados a perpetua por el crimen del ex rugbier Marcelo Longhi

La Justicia de Mercedes sentenció a Pablo Achard, el mejor amigo de la víctima, y a Ramón Flores. La sentencia, emitida por el Tribunal Oral en lo Criminal 2, coincidió con la requisitoria del fiscal Guillermo Lennard.


  • Lunes 10 de Junio de 2024
Condenados Marcelo Longhi

La Justicia de Mercedes ha emitido una sentencia ejemplar contra Pablo Achard y Ramón Flores, condenándolos a prisión perpetua por el asesinato del ex rugbier y presidente del Club Municipalidad de Vicente López, Marcelo Longhi, ocurrido en enero de 2022.

El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de Mercedes, compuesto por los jueces Juan Miguel Tillet, Pablo Vieiro y Juan Manuel Renaud Mass, encontró a los acusados culpables del delito de "asesinato agravado por cometerse con alevosía". Esta sentencia coincide con la requisitoria del fiscal Guillermo Lennard, quien durante los alegatos destacó la contundencia de las pruebas que demostraban la responsabilidad penal de ambos acusados.

La sentencia de prisión perpetua, que incluye accesorias y costas, fue impuesta después de un exhaustivo proceso judicial en el cual el fiscal Lennard argumentó que todas las pruebas presentadas confirmaban la culpabilidad de Achard y Flores. En su intervención, el fiscal solicitó la pena máxima, aunque de manera subsidiaria el Ministerio Público Fiscal (MPF) de Mercedes había solicitado una condena de 25 años de cárcel por homicidio simple, en caso de que no prosperara la acusación por asesinato agravado.

Los hechos

El 12 de enero de 2022, el cuerpo sin vida de Marcelo Longhi fue encontrado en la caja de su camioneta, abandonada a la vera de la ruta 47, a 8,5 kilómetros de Luján. Inicialmente, los investigadores no sospechaban de un homicidio, pero la situación cambió drásticamente cuando la autopsia reveló que Longhi había sido estrangulado.

La investigación avanzó rápidamente y, dos semanas después del hallazgo, se determinó la participación de Pablo Achard y Ramón Flores en el asesinato. La víctima, que vivía en Manuel Alberti, mantenía con ellos tanto una relación de amistad como de negocios, lo que facilitó la colaboración necesaria para cometer el crimen.

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