Una vez más los vecinos de Irizar deben alzar la voz. A la problemática de la falta de iluminación en las calles, se suma ahora un nuevo conflicto con el basural: las máquinas han comenzado a trabajar al lado de las viviendas del barrio Rincón de Irizar, algo que no está permitido.
“Nosotros lo único que esperamos es cuando se van del lugar. El OPDS los autorizó, con pruebas y todo no logramos revertir la situación pero lo que siempre vimos es que no se respeta nada del acuerdo. No hay balanza, habría que tener un control de cuántos metros cúbicos se rellenaba, si había basura mezclada”, planteó en diálogo con Diario Resumen, Germán Torres, vecino del lugar.
Además, Torres indicó que “se encuentran trabajando pegados a las viviendas, sin respetar las normas de seguridad establecidas por el propio OPDS”: “dice en el acuerdo firmado que deben dejan de rellenar antes de llegar a las viviendas, unos 80 metros antes. Estamos en riesgo total, tendrían que dejar entre 50 y 80 metros, pero están a 10 metros. Les importa nada, solo quieren facturar”.
El problema de esta cercanía es, en primer lugar, la seguridad. “Se llenó de todo tipo de alimañas, ratas, víboras, arañas, mosquitos, olores. Tenemos que gastar fortuna en desratizar, en insecticidas. Además, el riesgo de que se prenda fuego eso, que está pegado a las viviendas, puede ser una tragedia. Todo eso es inflamable, si se prende no lo frenas más. A ellos no les importa”, explicó.
“Hoy mismo estamos realizando por la página web de la Provincia las denuncias correspondientes para que se respeten los límites establecidos y se cumplan con las normas de seguridad que jamás esta gestión cumplió”, dijo Germán Torres aunque lamentó que quizás, nada se logre.
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