En junio se iría la última termoeléctrica que ha quedado en suelo pilarense

Todo indica que, tras años de intensa lucha, los pilarenses habrían ganado la guerra contra las termoeléctricas. Es que, al parecer, la última que quedaba en pie en el distrito se marchará cuando llegue el 30 de junio.

Se trata de la central Matheu III, de SCC Power (ex Araucaria Energy) ubicada en la Ruta 25 en la localidad de Villa Rosa. En enero el juez federal Adrián González Charvay modificó la medida cautelar vigente desde el 2017 contra la empresa, y autorizó el funcionamiento provisorio, con dos turbinas en el horario comprendido entre las 8 y las 21.

La habilitación parcial se extendía hasta el 30 de junio y, por la información que han recopilado los vecinos, la empresa habría decidido marcharse de forma definitiva. “Empezamos a averiguar un poco, y nos dijeron que estaban buscando un lugar para irse. El viernes pasado, porque nosotros veníamos haciendo mediciones con OPDS, la empresa y el Municipio, tomamos contacto con un funcionario de la firma. Nos llamó, nos dio la información de que habían tomado la determinación de que el 30 de junio se iban. Chequeamos con integrantes de la firma y nos dijeron lo mismo”, explicó Raúl Regis, presidente de la ONG 1810 Vecinos Unidos por Pilar.

El referente de la ONG indicó que “es una excelente noticia para la comunidad pilarense, para la gente que ha sufrido de forma constante” y añadió que “llegado el 30 de junio, todo da a entender que se van de Pilar”. “Además, tuvimos reunión con el Municipio que, si se van, necesitamos que se cambie la zonificación, para que no venga una empresa peor”, agregó.

“Fue dura la lucha. Por suerte hubo gente que se involucró. Hemos tenido idas y venidas, que ocurrían cuando se metía la política. Fue una lucha larga, más de seis años trabajando en esto, un montón de organizaciones. Por suerte la unión de los vecinos y el trabajo pareciera que harán que terminemos en un buen final”, planeó Regis.

Si bien están esperanzados, Regis indicó que se mantendrán cautelosos y a la espera del 30 de junio. “Nos han cambiado tantas veces las leyes del juego que uno abre el paraguas. Hoy están dando todas las informaciones, que llegan de distintos lugares, diciendo lo mismo. Sería loco que no se diera así, pero puede pasar. Estamos atentos, con la guardia alta, pero creemos que estamos en el buen camino y que el 30 de junio será la última vez que las vamos a escuchar”, argumentó.

Por último, recordó a Gustavo Madeira, miembro de la ONG quien falleció hace dos años: “es un día especial, hace dos años falleció nuestro querido integrante y compañero de lucha Gustavo Madeira. Queremos expresarle nuestro eterno agradecimiento por su labor, calidad humana, su compromiso y entrega a la causa. Su aporte ha sido invalorable, determinante. Si esto termina bien, Gustavo tiene mucho que ver”.