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La concejal Analía Leguizamón, luego de la última sesión ordinaria del Concejo Deliberante, apuntó que “en los casi dos años que llevamos de esta gestión, la calidad del trabajo legislativo en Pilar ha decaído. El número mayoritario de manos oficialistas, y de quienes han sido permanentemente funcionales a ellos, obturaron cualquier proyecto que no sea el de los propios”.
Leguizamón detalló que “si la intención política de no tratar proyectos de la oposición, se compensara de alguna manera con una producción legislativa por parte del Frente de Todos, que aborde los problemas que preocupan a los vecinos, estaríamos en todo caso hablando de falta de apertura y diálogo. Pero la realidad es que los proyectos del Frente de Todos, en su amplísima mayoría o no tienen ningún impacto real o si lo tienen resulta que los perjudican”.
Para graficar la situación del trabajo parlamentario, Leguizamón afirmó que “se ha abusado de los beneplácitos, los repudios y las adhesiones. Al tiempo que tratan y aprueban estos proyectos que no le mejoran la vida a nadie, se cajonean las iniciativas que propusimos como la ampliación de ayuda para comercios afectados por la pandemia, el plan integral de seguridad, los proyectos de transparencia y modernización del Concejo, ampliación de horario en Centros de Salud, entre otros”.
Consultada sobre la perspectiva de cambiar esta situación, la edil manifestó: “No podemos cambiar el pasado, pero podemos incidir para que los próximos dos años volvamos a tener un Concejo Deliberante equilibrado”.
“Este 14 de noviembre vamos a lograrlo con el voto. La oposición se verá fortalecida y esto va a permitir poner un límite claro a los abusos de poder que dañan enormemente la vida de los vecinos pilarenses”, concluyó.
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