Se retomó la licitación para reparar 24 locomotoras del tren San Martín

Luego de haber estado suspendida durante varias semanas, Trenes Argentinos Operaciones (SOFSE) reanudó la licitación para la reparación de las 24 locomotoras CSR SDD7 de la línea San Martín.

En este nuevo escenario, la fecha límite para la presentación de ofertas y apertura de sobres quedó fijada para el próximo 8 de agosto, y representa la quinta reprogramación desde que la iniciativa fue lanzada en abril.

La licitación había quedado en suspenso para evaluar la posible participación de una empresa de origen chino que no posee instalaciones propias en el país, ya que si bien se trata de una licitación nacional e internacional, los pliegos exigían la asociación con empresas locales.

Ante esto, la compañía china manifestó su voluntad de contratar un taller local para presentarse, y la situación quedó subsanada. La firma solicitó formalmente a la SOFSE que informara “las características y equipamiento utilizado normalmente en la República Argentina para este tipo de intervención”, requerimiento que la operadora estatal ya atendió, indicando las características generales de las plantas con las que cuenta el país.

Se estima que este potencial oferente se asociará con alguno de los talleres ferroviarios locales entre los que se encuentran BRf, Materfer y la ex TMH.

Vale recordar que la licitación había sido lanzada luego de que el Ministerio de Transporte autorizara por vía de excepción el llamado a una licitación nacional e internacional, dada la urgencia en avanzar con la reparación general de las 24 locomotoras con las que cuenta el San Martín.

Esto se debe a que las máquinas, que han cumplido recientemente 10 años de servicio, ya han superado el límite del kilometraje recomendado por el fabricante para la realización de esa revisión, es decir, unos 900 mil kilómetros.

Debido a esto, parte de las locomotoras se encuentran fuera de servicio y otras están presentando fallas, lo que redunda en una menor cantidad de formaciones en servicio y las consiguientes demoras y cancelaciones.

El estado de cosas es de tal gravedad que, en un documento interno, Trenes Argentinos admitió que “la situación actual es crítica”.