Pilar se convierte nuevamente en un referente provincial con la puesta en marcha de un plan que busca brindar oportunidades laborales a personas que recuperaron su libertad. En conjunto con la Provincia y actores sociales, el distrito articulará estrategias concretas para facilitar su reinserción y reducir la reincidencia.
El desafío de reinsertar a quienes recuperaron su libertad y evitar que reincidan en el delito es una tarea compleja que requiere del compromiso de múltiples actores. Con ese objetivo en mente, el Municipio de Pilar, el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de Buenos Aires y diversas organizaciones sociales pondrán en marcha en 2025 el programa Buenos Aires Contra la Reincidencia.
Esta iniciativa busca fortalecer las políticas de inclusión social y laboral destinadas a personas liberadas, brindándoles las herramientas necesarias para reinsertarse plenamente en la sociedad. A raíz de esto Pilar, con una larga trayectoria en el desarrollo de cooperativas que ofrecen oportunidades concretas de trabajo, será clave para llevar adelante este plan.
El distrito es pionero en la creación de espacios laborales destinados a quienes atravesaron situaciones de encierro. Actualmente, alrededor de 200 personas forman parte de cooperativas locales, donde no solo encuentran un empleo, sino que también una red de contención que les permite reconstruir sus vidas. Gracias a estos esfuerzos, la tasa de reincidencia entre quienes participan en estas organizaciones tiende a cero, un logro que coloca a Pilar como ejemplo a nivel provincial.
No obstante, el desafío sigue siendo significativo. Según datos del Patronato de Liberados, en Pilar hay cerca de 750 personas que recuperaron su libertad y aún no lograron reintegrarse plenamente. El objetivo del nuevo plan es incorporar a al menos 100 de ellas en programas laborales durante el próximo año.
De cara al lanzamiento del programa Buenos Aires Contra la Reincidencia, Pilar refuerza su compromiso con una política pública que apuesta a la inclusión y la reconstrucción de oportunidades para quienes más lo necesitan. La articulación entre el Estado, las organizaciones sociales y la comunidad será clave para continuar transformando realidades y sentar las bases de una sociedad más justa e inclusiva.
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