En la tarde de este domingo falleció Evelyne Lamartine, quien en 1977 supo ser la monja superiora de Alice Domon y Léonie Duquet, religiosas francesas desparecidas durante la dictadura militar.
Tenía 88 años y estaba radicada en Pilar desde hacía tiempo. Su vida terminó en el hogar Silvio Braschi, pero dejó una gran marca en la comunidad por su trabajo. Esta tarde desde las 19 se realizará una misa en su honor en la Parroquia, mientras que sus restos serán cremados en el cementerio Parque Recoleta.
La historia de la lucha de Evelyne parte desde el pedido de aparición de las religiosas desaparecidas, y nunca se detuvo. En el distrito trabajaba en una granja de rehabilitación para adictos a las drogas, y su recuerdo está latente en muchos vecinos que lograron superar ese problema.
Su labor solidaria y la lucha por los derechos humanos le valió varios reconocimientos, y de hecho, la Defensoría del Pueblo de Pilar entrega premios que llevan su nombre a personas e instituciones comprometidas y que trabajan por los derechos humanos.
Dejar un comentario