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Indicaron que no las dejan llevar a cabo sus actividades por el uso del lugar para una feria. Señalaron que habían prometido no volver a poner puestos allí y exigen una solución.
Un nuevo capítulo de la pelea entre las trabajadoras sexuales y el Municipio tuvo lugar en los últimos días, ya que como ocurrió en otras ocasiones, desde la Comuna promueven la instalación de una feria en la conocida “zona roja”, donde ellas se desempeñan, y ante la imposibilidad de llevar a cabo su actividad, volvieron a denunciar al personal del Estado.
Hay que señalar que se trata de una docena de personas afectadas, que fueron representadas por una de ellas, la cual en un video que circuló respecto de la problemática, sostuvo: “Nos acaban de amenazar y decir que nos van a llevar detenidas por el tema de las ferias que están armando hace un par de fines de semana”.
Esta situación, con los puestos feriantes erguidos en su lugar de trabajo les impide ejercer su actividad, y al querer hacerlo de todas formas, comienzan los roces con las fuerzas policiales que se hacen presentes en el lugar con la orden de prohibición.
“A nosotras nos iban a dar una solución porque la zona roja está habilitada hace como 12 años. Entonces el Municipio sabe que esto está decretado como zona roja”, expresa la trabajadora que no termina de comprender la situación por la que tienen que pasar y busca explicaciones. “No entendemos por qué hacen esto si saben que nosotras estamos acá y vivimos de esto porque ninguna tiene un sueldo fijo”, agregó.
En el lugar, una calle lateral del Corredor Aeróbico (La Pampa e Yrigoyen), se han llevado a cabo varias ediciones de las Ferias Urbanas de Pilar, la cual tendrá una nueva fecha durante este fin de semana, y siempre conlleva un dilema para las trabajadoras de la zona.
“Les proponemos que dejen los puestos y toda la plata que le compren a los puesteros la repartan entre todas las chicas. Porque es todo un fin de semana que nosotras perdemos de trabajar y es cuando más plata levantamos, además en fecha de cobro”, ironizaron en una nueva edición del conflicto.
Finalmente, también aclararon que “hace dos semanas estuvieron con la feria y habían dicho que ese solo fin de semana lo iban a hacer y no iban a volver más con la feria”, una promesa que parece no haberse cumplido, y abre el panorama a más rispideces en la relación con el Municipio.
Sin ninguna conclusión respecto de lo que pasará, las trabajadoras sexuales cerraron indicando que quienes arman los puestos intentaban agredirlas, pero ellas no se moverán del lugar, porque es la única manera de “pagar el alquiler y llevar un plato de comida a nuestras casas”.
Foto: Pilar de Todos
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