La Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) ha desmentido rotundamente la creencia extendida de que el gobierno nacional subsidia en su totalidad los servicios de transporte público en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Según afirmaciones de la AAETA, el 55% de los pasajeros del AMBA reciben subsidios directamente de la provincia de Buenos Aires.
Mediante una publicación en la red social X, la AAETA desmintió la noción de que el gobierno nacional financia todos los servicios de transporte, revelando que cerca de la mitad de los colectivos en el AMBA, aproximadamente 9.000 vehículos, reciben subsidios directos de la provincia de Buenos Aires. Además, la asociación instó a un debate informado sobre por qué otras provincias no pueden implementar un sistema similar, especialmente considerando que la mayoría recibe más fondos de coparticipación de los que contribuyen al Producto Bruto Interno (PBI) nacional.
La publicación de la AAETA también incluyó un fragmento del convenio de colaboración entre el ex Ministerio de Transporte de la Nación y el gobierno provincial, donde se establece claramente que las líneas de jurisdicción provincial y municipal del AMBA, que representan aproximadamente la mitad de toda la región, reciben subsidios transferidos por la Provincia de Buenos Aires.
Según la AAETA, el gobierno nacional solamente financia las "compensaciones tarifarias" de las líneas cuyos recorridos abarcan al menos una cabecera en la Ciudad de Buenos Aires, lo que representa un total de 9.625 colectivos, mientras que en términos de pasajeros, esta cifra se traduce en el 45%. Esto significa que, en última instancia, el 55% de los pasajeros del AMBA dependen de los subsidios proporcionados por la Provincia, no por el gobierno nacional.
La reducción de subsidios por parte del gobierno nacional ha generado preocupación entre las empresas prestadoras del servicio de transporte de pasajeros a nivel nacional. La eliminación del Fondo Compensador del Interior, que anteriormente brindaba importantes sumas de dinero a las provincias, plantea la posibilidad de un aumento en las tarifas del transporte público. Esta situación, combinada con los recientes incrementos en los pasajes de colectivos y trenes, agrava aún más las tensiones entre el gobierno nacional y los gobernadores, especialmente después del fracaso de la Ley Ómnibus.
En resumen, la revelación de la AAETA arroja luz sobre la compleja dinámica de subsidios en el transporte público del AMBA y destaca la necesidad de un debate informado y transparente sobre el financiamiento de este vital servicio.
Dejar un comentario