Reabrió la Iglesia Evangélica donde se produjo el accidente por el que falleció David

La iglesia de Manuel Alberti reabrió sus puertas luego de haber sido clausurada el 18 de diciembre. Allí se había desprendido una columna que provocó la muerte del niño de 10 años. El templo evangélico de Manuel Alberti reabrió sus puertas incumpliendo la clausura que se le había impuesto. En sus inmediaciones se había desprendido una columna de cemento que cayó sobre David Rosso, un niño de 10 años que se encontraba allí. Finalmente, falleció a causa de las lesiones un mes más tarde. La clausura había sido impuesta por el Municipio el 18 de diciembre luego de reiterados reclamos por parte de familiares de David. El motivo fue la falta de planos aprobados, por lo cual se cerró al público y se multó a la institución. Sin embargo, días más tarde, la iglesia reabrió sus puertas pese a la restricción. Fueron los fieles quienes arrancaron las fajas de clausura. Por otro lado, el templo habría presentado nuevos planos del lugar. Desde la familia de David adelantaron que volverán a realizar reclamos al respecto y van a iniciar acciones judiciales contra el pastor, que se había comprometido a hacerse cargo de la internación del pequeño en el Hospital Austral, promesa que no se concretó. Indicaron que se sienten desesperanzados. El caso El pasado 3 de octubre, David Rosso se encontraba jugando en el predio de una Iglesia Evangélica de Manuel Alberti cuando una columna de cemento le cayó encima. El accidente le provocó múltiples fracturas y derrames internos. Ingresó primeramente en el Hospital Falcón, en donde lo derivaron al Sanguinetti, pero allí no había lugar para recibirlo. Finalmente, con la intervención del pastor de la iglesia, el pequeño fue internado en el Hospital Austral. El responsable se había comprometido a hacerse cargo de los gastos del centro de salud privado. Si bien afrontó una importante suma al principio que ronda los 75 mil pesos, días más tarde se desentendió del asunto a medida que fue incrementándose la cuenta, dejando así a los padres de David con una importante deuda que supera el millón de pesos. El niño falleció un mes después del accidente en la iglesia. Sus familiares realizaron múltiples reclamos en pedido de justicia y fueron finalmente recibidos por la Comuna. Alegan que el templo constituye un peligro para todos sus fieles ya que cuenta con múltiples falencias estructurales. Por ejemplo, hace días se cayó un portón en la parte posterior de la iglesia que estuvo a centímetros de aplastar a una niña, relataron los familiares de David. De hecho, le indicaron a los padres del pequeño que la iglesia ni siquiera está registra como tal en el organismo correspondiente. Finalmente fue clausurada el 18 de diciembre. Días después los fieles arrancaron las fajas de clausura y el templo reabrió sus puertas.