Martes 19 de Marzo de 2024

Emprendedores: cuando lo esencial es invisible a los ojos


  • Domingo 20 de Septiembre de 2020
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"Lo esencial es invisible a los ojos" decía El Principito. Y los emprendedores solemos ser tan invisibles como esenciales. No estamos sindicalizados, no cortamos calles, no marchamos, no nos representa nadie. SOLO TRABAJAMOS.

Los emprendedores SOMOS ESENCIALES.

Desde el mes de marzo, la palabra "esencial" marcaba la diferencia entre poder trabajar y no.

Luego de seis meses de aislamiento social, preventivo y obligatorio ¿qué es esencial?

Lo esencial es sumamente subjetivo y para comprenderlo hay que tener algo que nos falta: empatía, la habilidad de ponerse en el lugar del otro. Algo escaso por estas horas y más aún en aquellos que cobran un sueldo y están detrás de un escritorio.

Lo esencial varía según de qué lado del mostrador estás. Lo esencial varía según las necesidades de cada uno, según su realidad, la cual es única e intransferible.

Sin lugar a dudas, el trabajo ES esencial para esa generación acostumbrada a vivir de lo que produce. Esa generación que no quiere un plan, un subsidio, un préstamo o hacer cola en una olla popular, que no quiere mudarse a la casa de sus padres (si tiene la suerte de tenerlos) porque ya no puede pagar el alquiler. SÓLO QUIEREN TRABAJAR. 

A esa generación estatizada para la cual la ayuda fue inmediata, le hace frente otra con un gran espíritu emprendedor, un espíritu emprendedor que es una víctima más del coronavirus, a la cual este virus y la inoperancia del Estado para ayudarlos, le dio su golpe mortal luego de muchos otros golpes que viene sufriendo desde hace mucho.

El problema sigue siendo que lo esencial es invisible a los ojos de las autoridades que son las que deben pensar en un plan de rescate y ayuda a los que definitivamente vamos a sacar al país adelante por mérito propio. Los emprendedores, las pymes, los comerciantes seguimos siendo castigados, una y otra vez.

Se entiende que el Estado debe atender la urgencia, pero no se puede vivir en Emergencia eterna. Nadie pasa meses en la guardia de un hospital. A este país siempre le faltó el tratamiento -el plan­ que permitirá darle el alta a ese enfermo.

Todos conocemos el diagnóstico, o deberían conocerlo: los emprendedores pilarenses en un alto porcentaje son informales, lo que los dejó fuera de cualquier tipo de ayuda del Estado, no están digitalizados y hoy por hoy hasta a los digitalizados se les dio un golpe mortal con las nuevas políticas cambiarias ya que la mayoría de las aplicaciones y herramientas disponibles se facturan en dólares, la gran mayoría no se valen del comercio electrónico, ni siquiera apelan al pago electrónico por las elevadas comisiones, muchos no tienen los conocimientos y otros tantos no cuentan con las herramientas y la conectividad necesaria.

Y en todo este tiempo NO SE HIZO NADA para revertir esta situación.

Son muchos los que viven de lo que venden en ferias ya que los costos de logística suelen ser más caros que el producto en sí, los que tenían un local se vieron obligados a cerrarlo, muchos debieron reconvertir sus actividades para subsistir. Y las malas noticias siguen.

 Entonces ¿cuál es el plan? Porque parece fácil decir NO  HABRÁ NUEVAS APERTURAS, parece fácil decir HAY QUE ESPERAR. Parece fácil extender una cuarentena tan eterna como inexistente.

En seis meses no hubo una sola medida en beneficio de este sector, fueron muchas las ideas y proyectos que propusimos porque veíamos que se realizaban con éxito en otras localidades, pero sin el apoyo del Estado es imposible concretarlas. Lo que se hizo lo hicieron los mismos emprendedores y alguna que otra acción aislada pensando en la Economía Popular o en el comercio con todo debidamente en regla.

Desde Pilar Emprende ofrecimos capacitaciones gratuitas, acompañamos a los emprendedores en este difícil transitar, hicimos hincapié en el Programa Compre Pilar, lanzamos el proyecto Hecho en Pilar para lograr un sello local para fomentar el trabajo de los emprendedores locales y visibilizarlos, armamos grupos de apoyo y asistencia, compartimos las terapias emprendedoras para poner en común problemas y soluciones; nos juntamos con organizadores de ferias y feriantes para conocer su realidad y ayudarlos.

Pero todo eso no alcanza, nunca alcanza.

En estos años trabajando con emprendedores hemos experimentado la certeza de que no se necesita mucho para generar un cambio, con mínimas acciones, acompañamiento, herramientas, escucha activa y capacitación los cambios son notables y en muchos casos inmediatos. Nunca nos quedamos en la crítica, siempre acompañamos nuestro reclamo con propuestas concretas y realizables.

Los emprendedores SOLO QUEREMOS TRABAJAR. No nos vuelvan a dar la espalda, no nos vuelvan a invisibilizar, porque los emprendedores somos tan importantes como la vacuna para superar esta crisis que atravesamos y por sobre todas las cosas, somos ESENCIALES PARA SACAR ESTE PAÍS ADELANTE.

Lic. María Fernanda Ipata

Coordinadora de Pilar Emprende

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