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Una nueva semana de carrera en territorio brasileño tuvo lugar en esta oportunidad y Matías Rossi volvió a decir presente, esta vez en el autódromo de Cascavel donde se llevaría grandes sensaciones.
No se pudo celebrar un podio pero el piloto delvisense de a poco se va adaptando a su nueva unidad y eso ha quedado plasmado en los resultados obtenidos a lo largo de este fin de semana.
El sábado había comenzado cuesta arriba con un 22° puesto en la clasificación, pero Rossi se encargó de remediarlo sin mayores problemas y con un gran trabajo a bordo de su Toyota Corolla llegó a la meta en la 10° colocación. Sin embargo esto fue modificado por los jueces, quienes lo penalizaron con 20 segundos por pisar la línea blanca a la salida de boxes y por ende finalizó en la 15° posición la quinta jornada.
La sexta fecha contaba con dos compromisos y en la clasificación sufrió un despiste que no le permitió competir en la Carrera 1, debido a que en el mismo se vio comprometido tanto el auto como los neumáticos. Por eso, el Misil salió a probar el auto durante cuatro vueltas tras un buen trabajo del equipo de mecánicos y eligió guardarse de cara a la Carrera 2.
Un panorama difícil se le planteaba en el cierre, habiendo perdido la posibilidad de su primer Top Ten y con un auto que había sufrido golpes largó desde la cola en lo que terminaría siendo su mejor actuación en la competencia.
El representante de nuestro distrito tuvo un avance meteórico en la carrera, al igual que en su rendimiento, y escaló posiciones hasta finalizar en la 10° colocación. Con la fortuna de que esta vez no sufriría ningún recargo de tiempo y celebraría haber conseguido meterse entre los diez mejores. Aunque siga relegado en el campeonato de Stock Car, se empiezan a ver reflejos del Matías Rossi que disfrutamos en las competencias de nuestro país que invitan a ilusionarse con verlo como protagonista en las futuras carreras.
Foto: Bruno Terena - Full Time Sports
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