Un cimbronazo fuerte fue el que le tocó sufrir a Real Pilar en su tercer compromiso del Torneo Clausura del Campeonato de Primera C, debido a que en un partido de altísima paridad terminó siendo derrotado en la última pelota y a través de un disparo desde el punto penal.
Muchas eran las expectativas que depositaba el elenco conducido por Marcelo Raya de cara a este encuentro ante Ituzaingó en condición de local, ya que la dificultad que envolvía a este rival se presentaba como una buena oportunidad para dar un golpe y agarrar envión de cara a lo que viene en un torneo que ha comenzado adverso en cuanto a resultados.
En la primera etapa se vio mejor al dueño de casa, quien se hacía cargo del dominio del balón y generaba buenas asociaciones, aunque mostraba un claro déficit a la hora de la definición. En la segunda etapa la visita mostró una mejor cara y puso en aprietos a los pilarenses, pero no se presumía de manera cercana la llegada de un gol. Es más, la oportunidad más clara del juego sería del Monarca, con un disparo de Juan Bautista Arricau que se estrelló en el palo.
A los 30 se interrumpió el juego por un golpe en el pecho de un rival, que llevó al ingreso de la ambulancia y una vez fuera de peligro se reanudaron las acciones.
Cuando todo parecía ir acabando con igualdad en cero, el ingresado José Montiel realizó una jugada individual eximia por banda derecha, dejando a dos en el camino y siendo tocado de atrás por Nahuel Ríos al entrar al área. Esto derivó en un penal ejecutado por el histórico Alcides Miranda Moreira, quien lo pateó fuerte al medio para vencer a Sultani y decretar la victoria por 1 a 0 del único líder del certamen.
Otro desenlace esquivo para los representantes de nuestro distrito, quienes intentarán recuperarse la semana próxima al visitar a Dock Sud por el cuarto compromiso de esta segunda parte de la temporada.
Foto: Ituzaingó Prensa
Dejar un comentario