Desde el gremio informaron que seguirán con la medida de fuerza ya que Provincia no los convocó para dialogar. Hoy terminó la huelga por 72 horas que tuvo un amplio acatamiento y afectó el retorno a las aulas. Mañana también paran los auxiliares de escuela.
Mientras el Gobierno provincial se reunía con referentes del Frente Gremial Docente Bonaerense para ponerle un alto al conflicto, el gremio disidente UDOCBA (que no se encuentra nucleado en el FGDB) concretaba una reunión con los secretarios generales donde se determinó que continuarían con el paro durante lo que resta de la semana y que el viernes, volverían a llamar a asamblea con la idea de seguirlo el lunes si es que no obtienen una respuesta favorable por parte del Gobierno provincial.
Así lo informó el referente local de UDOCBA, Miguel Perna, quien comentó que la medida de fuerza sigue vigente ya que la Provincia “no nos llamó para dialogar sobre las problemáticas que originan el conflicto”.
El gremio había comenzado el paro el lunes junto a los demás sindicatos de maestros de la provincia de Buenos Aires. Una vez concluida esta huelga general por 48 horas, UDOCBA continuó con la medida de fuerza durante un día más. Esta decisión contó con un amplio acatamiento entre los afiliados al sindicato e inclusive entre otros maestros no adheridos al gremio.
Ahora, ante esta nueva disposición de extender el paro, el regreso de los chicos a la escuela vuelve a estar comprometido. No solo por la huelga de UDOCBA sino también por la de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) que incluye a auxiliares de instituciones educativas hecho que, en algunos casos, impide que las escuelas abran sus puertas.
En tanto, Perna confirmó que los puntos de discusión se mantienen y son el aumento de sueldo, el recorte en los cupos de los comedores escolares, la paralización de las obras edilicias y la falta de mobiliario.
La antesala de la negociación
Según la información que se barajaba hoy, el gobierno provincial, de acuerdo con la explicación de funcionarios de Educación, estaba dispuesto a avanzar en cuestiones de servicio, edilicios u otras variantes sin tocar la discusión salarial.
En este sentido, desde el Ejecutivo ya amenazaron con descontar días, lo que representaría entre 360 y 800 pesos. Es una presión similar a la aplicada durante la huelga de 17 días al comienzo del ciclo lectivo y que, después, quedó licuada con el acuerdo del 32 por ciento.
Scioli exhortó a los sindicatos de maestros: “Es necesario que contribuyan como ha ocurrido con otros gremios y empresarios. Unos se han comprometido a cuidar el empleo; otros dijeron, ‘si bien mantenemos nuestro reclamo, no vamos a hacer movilización ni paro”.
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