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Reclamaron por el accionar del Municipio en varios ítems. La forma en la cual se quiere regular el cableado aéreo, y la falta de obras y trabajos para acompañar el crecimiento del distrito, lo más apuntado.
El distrito continúa haciéndose eco del nuevo régimen de cableado que se está tratando de instalar desde el Ejecutivo, y en este caso, fue el turno del comercio local, que estuvo representado por un histórico de Pilar.
Antoine Aon, vecino pilarense con largos años en el rubro titular de la tienda más vieja de Pilar, se manifestó dando a conocer su opinión, la cual es muy común entre sus pares. “Me parece que el centro de Pilar necesita el cableado subterráneo ya, aparte hay una expectativa desde hace un tiempo, porque Telecom ya había hecho una parte para la fibra óptica, y el Municipio no fue previsor como para poder compartir eso con otras empresas”, sostuvo, y agregó: “Sería interesante inclusive que el Municipio pudiese encarar una obra de ese estilo y alquilar”.
Por otra parte, el vecino indicó que estas son claras formas de desestabilizar al centro comercial para luego trasladar el centro cívico hacia el Kilómetro 50. “Deberían obligar a que el cableado no sea más aéreo, porque es hacia donde va todo el mundo, y resulta que nosotros vamos al revés. Cada vez más cables por encima y como si fuera poco, muy desordenado. Inclusive las cámaras que pone el Municipio son la que peor cableado tienen, casi por el piso, desprolijo y desordenado, cuando debería ser el que mejor está, hay un gran descuido”, continuó reclamando.
Aon apunta a que esto “afecta no sólo a los comerciantes, sino a todo el centro de Pilar. Tenemos una peatonal, pero para tenerla bien, no puede haber a 20 metros los cables por el suelo. Primero que se haga lo primero y después vemos. Hay que comenzar por donde corresponde”.
En tanto, la queja también abarca otros aspectos. “Últimamente en el centro de Pilar está todo abandonado. Acá tenemos una parada de colectivos sobre la calle San Martín a mitad de cuadra de la plaza, que está hecha hace 20 años y era para el Pilar de ese entonces, con 10 personas que esperaban el colectivo y no como ahora que se desborda. Esto lo veo a diario, cosas en mal estado, sin iluminación, y con un abandono general”, consideró.
Finalmente, aseguró que “no se acompañó el crecimiento de Pilar en nada, ni siquiera en cosas simples que inclusive no cuestan tanto. Es poner atención y puntualizar, nada más. No se necesita hacer gastos exorbitantes”. Y respecto a las obras que se necesitan de cara al futuro, para las cuales el Municipio analiza el pedido de dos créditos, indicó: “No hay claridad en la gestión. El pueblo debe saber cuál es el proyecto para el que se va a pedir esa suma de dinero”.
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