El pasado sábado 30 de noviembre se llevó a cabo en el Cuartel Central de Bomberos Voluntarios de Pilar, la tradicional cena de fin de año, donde los servidores públicos compartieron con sus familias momentos muy emotivos, como la jura como bomberos de aspirantes; ascensos y entrega de reconocimientos a bomberos, suboficiales, oficiales y oficiales jefes.
Pero, además, en esta oportunidad la celebración tuvo un invitado de honor: Tango, un perro Golden Retriever, integrante de la Brigada K-9, de canes especializados en búsqueda y rescate de la entidad bomberil pilarense, que por razones de edad fue pasado a retiro. Efectivamente, Tango ya hace unos meses cumplió 9 años y tuvo su merecido reconocimiento junto a su guía, el bombero Nicolás Ramos.
La afinidad del guía con su perro, después de tantos años de entrenamiento y trabajo en campo, llevó a que el guía decidiera tatuarse la imagen del can en uno de sus brazos.
“Tango forma parte de mi familia, así que, si bien se retira del servicio, continuará siendo nuestro perro de compañía”, confesó el servidor público.
El perro, estuvo abocado siempre a trabajar en la búsqueda de personas vivas en grandes áreas, en estructuras colapsadas y también se especializó en rescate acuático.
“Tango logró los certificados cicotecnicos otorgados por el Departamento de Cicotecnica del Ministerio de Seguridad –comentó el bombero- en la etapa 1 de búsqueda de personas vivas en estructuras colapsadas en grandes áreas. Las certificaciones son importantes porque juzgan el trabajo del perro y de su guía, por parte de jueces que nos dicen que estamos haciendo bien y que estamos haciendo mal”, amplió Ramos.
“Es importante someterse a las pruebas para certificar si estamos realizando el trabajo correctamente, porque lo que estamos haciendo es buscar personas con vida en lugares muy complicados y por eso tenemos que estar seguros que nuestros perros están trabajando correctamente”, añadió.
El guía Nicolás Ramos continúa adiestrando a otros dos perros de la Brigada –K-9 de Bomberos de Pilar: uno es Rayo, que ya está certificado en la búsqueda de personas vivas en grandes áreas.
“Es importante tener en cuenta que, en la Provincia de Buenos Aires, dentro de la Federación que integramos hay solamente dos perros que están operativos y certificados para estas tareas”, acotó sin ocultar su orgullo el bombero.
El otro Golden es Thor que está siguiendo los pasos de Tango y que ya aprobó las pruebas de obediencia y sociabilidad. “Es un gran orgullo haber trabajado con Tango durante todos estos años –acotó-, haber aprendido juntos todo lo que significa el adiestramiento y el trabajo en campo. Por un lado, estoy triste por su retiro, pero por otro nos da mucha alegría por el excelente trabajo que realizó Tango durante todos estos años”.
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