Viernes 09 de Mayo de 2025

ROSPI, la red que presta elementos ortopédicos y esperanza en Pilar

Cumplió su primer año de vida la Red Ortopédica Solidaria de Pilar (ROSPI), una iniciativa nacida desde la ONG "Somos Red" que ya facilitó más de 50 elementos ortopédicos a personas en situación de vulnerabilidad.


  • Viernes 09 de Mayo de 2025
Elementos ortopédicos Pilar

Una silla de ruedas, una cama ortopédica o un simple bastón pueden marcar la diferencia entre la dependencia y la autonomía. Con esa convicción nació ROSPI, la Red Ortopédica Solidaria de Pilar, una iniciativa local que acaba de cumplir su primer año de funcionamiento. En estos doce meses, el proyecto no solo facilitó el acceso a más de 50 elementos ortopédicos a personas de bajos recursos, sino que también tendió puentes entre distintas instituciones sociales, religiosas y civiles, unidas por la vocación de ayudar.

ROSPI es una creación de la ONG “Somos Red”, que a su vez surgió como continuidad de la antigua Fundación PIBES. “Cuando la persona que estaba a cargo de la fundación decidió dejarla, un grupo de personas que ya veníamos trabajando ahí nos ofreció continuar con el proyecto. Como no podíamos seguir funcionando como fundación, nos reorganizamos como ONG y desde entonces seguimos trabajando de la misma manera, pero con más gente sumada”, explicó Claudia Maggio, coordinadora de la red, en diálogo con Resumen.

El nacimiento concreto de ROSPI se dio en una reunión interna de la organización, cuando surgió un pedido específico: un artículo ortopédico para una persona con movilidad reducida. “Fue entonces que comenzamos a pensar una solución más estructurada. Decidimos armar un sistema de comodato, se presta el elemento, se lo usa el tiempo necesario, y luego se devuelve para que otra persona pueda aprovecharlo”, relató.

El nombre ROSPI surgió de ese impulso inicial y rápidamente tomó forma, ya que en abril de 2024 la red comenzó a funcionar de manera activa. “El primer año fue muy intenso. En apenas nueve meses de actividad hicimos 32 comodatos que permitieron entregar 56 elementos. Hay veces que una misma persona necesita más de uno, como una silla de ruedas, una cama ortopédica, un colchón antiescaras. Pero la demanda es muy grande: recibimos 300 pedidos y sólo pudimos responder a una parte”, señaló Maggio.

La clave de ROSPI es el entramado solidario que logró tejer con otras instituciones. “Desde el inicio tuvimos la premisa de no mirar ideologías ni religiones, sino sumar a quienes quisieran ayudar. Así fue como se incorporaron instituciones como la parroquia de Peruzzotti, iglesias evangélicas de varios barrios, Cáritas Central, Fundación Confiar, Manos en Acción, y muchas otras”, detalló. A través de un grupo de comunicación que reúne a todas las entidades, se comparten los pedidos y se organizan las entregas.

Cada institución conserva los elementos que tiene en custodia, lo que permite una mejor administración y seguimiento. “Así, ninguna organización pierde lo que tiene. El grupo permite coordinar rápido y saber quién puede aportar qué. La red se activa cada vez que aparece una necesidad”, explicó.

Entre los elementos más solicitados se encuentran las camas ortopédicas, las sillas de ruedas, bastones, muletas y colchones antiescaras. “Los adultos mayores son quienes más los requieren, pero muchas veces las entregas oficiales, como las de PAMI, se demoran. En esos casos, prestamos el elemento hasta que llega el suyo. Después nos lo devuelven y vuelve a circular”, agregó la referente.

Además del trabajo articulado, el proyecto también se nutre de la solidaridad espontánea de la comunidad. “Gracias a la difusión que tuvo ROSPI, mucha gente empezó a llamarnos para donar cosas que ya no usa. Algunos tenían sillas de ruedas, otros bastones o fajas. Todo ayuda. La respuesta nos sorprendió. Esto superó todas nuestras expectativas, estamos emocionados cada día”, expresó Maggio.

Uno de los grandes desafíos logísticos es el acceso al lugar donde funciona la ONG, ubicada en una calle de tierra en el límite con la localidad de Astolfi. “Llegar hasta acá no siempre es fácil, sobre todo cuando llueve”, contó. Para resolver ese obstáculo, la Fundación PIBES les cedió una camioneta con la que pueden trasladar los elementos hasta los domicilios de los beneficiarios o a los puntos de entrega con otras instituciones.

Pero el trabajo de ROSPI no se detiene en el préstamo de materiales. Este año, la organización ya proyecta una nueva iniciativa. “Queremos reconocer el esfuerzo de quienes cuidan a otras personas. Por eso estamos armando un proyecto para capacitar a cuidadores familiares. Muchas veces hay alguien que está al lado de un paciente en cama y no sabe cómo acompañar correctamente. Queremos que médicos especialistas los capaciten y les brinden herramientas prácticas para cuidar sin lastimarse y sin sentirse solos”, anticipó.

Para colaborar con ROSPI o solicitar ayuda, se puede enviar un mensaje al número 11 5378-3081.

Dejar un comentario

Los campos marcados son requeridos *