Seis días después de los primeros trabajos de rescate por parte de Defensa Civil, el cauce apenas desciende y el número de desplazados se mantiene inalterable. Con un pronóstico poco favorable, reina una tendencia pesimista en el corto plazo.
Pese a la llegada del buen clima luego de las intensas lluvias que dejaron más de 50 evacuados en el distrito desde el pasado miércoles, la situación en el río Luján no mejora y el regreso de los desplazados a sus hogares se vislumbra cada vez más lejano en el tiempo.
En comunicación con el programa “La Mañana de Resumen”, de FM Del Sol (91.5), el titular de Defensa Civil, Rubén Romero, actualizó el estado de las tareas llevadas a cabo, y se mostró pesimista respecto de una mejoría a corto plazo.
“Seguimos con el centro de evacuados funcionando. Estos días, el agua del río Luján no había bajado, pero ahora está bajando muy lentamente. Estamos hace muchos días, desde el miércoles, y eso nos tiene preocupados”, expresó.
Concretamente, Romero señaló que en la dependencia municipal preparada especialmente para estos casos, se supera el medio centenar de evacuados. “Tenemos 53 evacuados, de los cuales hay 17 adultos y 36 menores, todos ellos en el centro de evacuados de la calle Dardo Rocha al 800, que montamos con la Municipalidad y tratamos de mejorar día a día”.
Asimismo, el director de Defensa Civil ofreció su opinión respecto de los pronósticos ofrecidos por el Servicio Meteorológico Nacional para los próximos días, y señaló que la tendencia marca claramente la posibilidad de nuevas lluvias, que no harían sino empeorar la tarea.
“El pronóstico nos dice que mañana, el jueves y hasta el viernes podríamos tener agua, pero esperemos que la gente que maneja el Servicio Meteorológico se equivoque. Tenemos una primavera complicada, con mucha caída de agua, así que hay que estar preparados y atentos”, argumentó.
Cabe recordar que, a los problemas suscitados por los 61 milímetros de agua que cayeron sobre Pilar en un lapso de tiempo muy corto, y que generaron la crecida del río, se sumó la semana pasada la llegada de las aguas provenientes de zonas más altas, algo que demoró el escurrimiento y generó que la situación se viera gravemente empeorada.
A diferencia de otras inundaciones que tuvieron lugar este año, en esta oportunidad el foco de evacuación se centró únicamente sobre el castigado barrio Río Luján, al punto de que todos los evacuados pertenecen a esa zona.
Por otra parte, también se diferencia en esta instancia la incapacidad de medir la altura del cauce por parte del personal de Defensa Civil, ya que no cuentan con la posibilidad de realizar la medición correspondiente por las obras de saneamiento que comenzaron hace algunos días en el río.
Dejar un comentario