En la tarde de ayer la fuerte tormenta que azotó el distrito dejó numerosas calles de Pilar completamente bajo el agua. Después de las 15 las precipitaciones se hicieron intensas y dejaron un acumulado de 58 milímetros. El centro de la ciudad cabecera fue uno de los más afectados y las calles por momentos se transformaron en verdaderos ríos. Los pilarenses manifestaron sus quejas por deficiencias en el sistema de desagües.
Dejar un comentario