Provenzano quiere revancha en Chile

Máximo integró Los Pumas en el inicio de la temporada de Seven en Punta del este, donde Argentina tuvo una pobre actuación. Y busca sacarse la espina en Viña del Mar. El arranque de la temporada de seven no fue lo esperado por Los Pumas. La selección nacional tuvo una opaca producción en el tradicional torneo de Punta del Este y buscará revancha en los próximos días en Viña del Mar. Pese a eso, los días y los encuentros celebrados en Uruguay quedarán grabados en la memoria de Máximo Provenzano, el back de Alumni que fue convocado para ser parte del conjunto albiceleste en las primeras dos citas de la temporada. “La verdad es que me sorprendió el llamado para ser parte de Los Pumas 7’s, no me lo esperaba. Estoy muy contento por esta convocatoria y espero estar a la altura de los acontecimientos”, le contó Provenzano al sitio www.aplenorugby.com. La citación del jugador de la Tortuga fue una sorpresa para muchos (sobre todo porque hasta el fin de semana pasado en Uruguay, nunca jugó oficialmente a esa modalidad) pero Máximo, como todo su equipo, tuvo un 2017 de altísimo rendimiento y un crecimiento exponencial por lo que la convocatoria tiene mucha lógica. - ¿En qué momento te llegó el llamado después de un gran año con Alumni? - Llegó en un lindo momento, cerrando un buen año con el club y seguro arrancando uno aún mejor. Es un orgullo enorme tener la posibilidad de jugar con la camiseta argentina. - Alumni tiene uno de los mejores jugadores argentinos de la modalidad en la actualidad como Franco Sábato ¿hablaste con él para que te diera algunos tips? - Sí. Franco está hace bastante en el Circuito y es uno de los referentes en esa modalidad. Hablamos bastante seguido con él y siempre me tira algún tip. En Viña del Mar, Provenzano y sus compañeros buscarán sacarse la espina de un flojo arranque de temporada en Punta del Este. Allí Argentina pasó la primera fase con lo justo pero en la segunda dejó todas sus posibilidades al caer frente a Uruguay, Alemania e Irlanda, quedando 4° en la Copa de Bronce. El título quedo en manos de Sudáfrica, que en el duelo por la corona dio cuenta del sorprendente Chile por 21 a 5.