La Reserva Natural supera registros de visitas, pero limitará su horario ante la llegada del frío

El primer cuatrimestre de este 2021 mostró números por encima de años anteriores. Sin embargo, para resguardarse de las bajas temperaturas se decidió acortar una hora la actividad, por lo que el cierre será a las 18.

Luego de un año con estrictas limitaciones para abandonar los hogares en la lucha contra la pandemia, el contacto con la naturaleza ha sido una de las grandes elecciones de los vecinos, y nada mejor que aprovechar la Reserva Natural de Pilar para ese fin.

Por esa razón, desde este espacio, su referente Graciela Capodoglio ha manifestado que una gran cantidad de personas son las que visitan diariamente los cientos de hectáreas que incluyen una gran variedad de flora y fauna.

De todas maneras, la llegada de las bajas temperaturas en la antesala del invierno, obligan a adecuar el horario, acortando una hora las actividades, ya que en vez de mantener las puertas abiertas hasta las 19, se limitará con un tope de ingreso hasta las 18.

“Está llegando el invierno y cambiamos los horarios. Muchas personas vienen justo antes de cerrar para ver el atardecer y tomar uno mates, pero se decide esto por una cuestión de seguridad”, explicó Capodoglio.

La caída del sol y el frío es una combinación que invita al contagio de las típicas enfermedades de estación, algo que se busca evitar en tiempos donde el sistema sanitario se encuentra al máximo de sus capacidades para atender los casos de coronavirus.

No obstante, desde la Reserva también destacaron que ha sido un grato comienzo de año en relación a la cantidad de vecinos que visitaron el espacio. “Para muchos pilarenses este es el único lugar que tienen para estar en contacto con la naturaleza, y por eso tenemos que tomar todos los recaudos para que el área continúe abierta en medio de esta pandemia. En el primer cuatrimestre superamos la cantidad de visitantes que tuvimos en el mismo período de 2019, lo que demuestra que mucha gente está usando la Reserva”, señaló.

Asimismo, destacaron que “muchos vienen con su familia por primera vez, para conocer, relajarse y porque tienen la tranquilidad de que se siguen los protocolos. Estamos aceptando hasta 10 personas por burbuja. El circuito tiene un sentido por cuestiones de educación ambiental, pero ahora con un beneficio extra, que hace que nunca te cruces con nadie que no pertenece a tu burbuja. También hay capacidades máximas de gente por sendero, lo que implica distanciamiento entre los distintos grupos”. A eso se le suma el uso de barbijo, alcohol en gel, la toma de temperatura al ingreso, y se suma el pedido de que cada visitante lleve lo que va a utilizar y consumir. De esa manera, para los visitantes, sólo queda “relajarse y disfrutar de la naturaleza, el sol y distenderse, que en este momento lo necesitamos mucho”, cerraron.