Así lo expresó el titular del Organismo de Defensa al Consumidor, Sergio Bivort. Además, aclaró que el Municipio no actuará en los casos que los comercios incumplan con los clientes sobre esta norma.
Recientemente se reglamentó la ordenanza que establece la obligatoriedad del libro de quejas para todos los locales con atención al público. Empezará a regir en seis meses, plazo durante el cual se trabajará en un programa de difusión con los comerciantes.
“Se dispuso este plazo de gracia de seis meses para evitar que un cambio de esta magnitud tome por sorpresa a todo el mundo”, comentó Sergio Bivort, titular del Organismo de Defensa al Consumidor, al aire de “La Mañana de Resumen” (FM Del Sol 91.5).
Tras la reglamentación, muchos comerciantes expresaron a este medio su desconocimiento de la normativa, y en varios casos su desacuerdo. En este sentido, Bivort declaró que “esto no es una cuestión de consenso, sino de aplicación de lo que surge en las leyes nacionales y provinciales que están en vigencia. Los municipios no legislan sobre cuestiones de fondo, pero sí pueden dar normas de aplicación práctica”.
Cabe recordar que una vez que el cliente registra su queja, el comercio le debe dar un comprobante y responder dentro de los cinco días hábiles. Sobre esto, el funcionario aclaró que “todo lo que suceda en el libro de quejas no es motivo de revisión de la Municipalidad, sino de la interacción entre las partes”. Es decir que si el comercio incumple alguno de los puntos, el cliente puede seguir un camino judicial o uno administrativo en el Organismo de Defensa al Consumidor de Pilar.
Ranking
Desde que Bivort está al frente del Organismo en octubre, hay aproximadamente unos 700 expedientes iniciados. De ellos, un 22 por ciento son quejas sobre telefonía móvil. En segundo lugar están los servicios financieros como tarjetas de crédito.
Sobre ambos, el funcionario opinó que “son conflictos pequeños que como no se solucionan adecuadamente terminan en conflictos más grandes”.
Omisión
El ex intendente prefirió no tomar partido en cuanto a cuestiones electorales. Explicó que su ingreso al Municipio es por una actividad técnica, y no significa su ingreso a la política, de la cual aseguró estar apartado. “Ejerciendo una actividad técnica prefiero omitir mis opiniones políticas”, expresó.
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