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Se trata de Semcor S.A. Es señalada por los comerciantes locales por querer percibir un retroactivo de cinco años. Había sido apuntada por ediles radicales mendocinos por haber perpetrado la misma medida incumpliendo “grave y groseramente” con su contrato.
Las quejas de los comerciantes pilarenses por el cobro de un retroactivo de cinco años de la tasa de Publicidad y Propaganda pusieron bajo la lupa a la empresa Semcor S.A., encargada del cobro del tributo en el distrito desde el 2013.
Las críticas, apiladas en la Sociedad de Comerciantes, Industriales, Propietarios y Afines (SCIPA) de Pilar, apuntan en dos sentidos. El primero, que el cobro de la tasa iba dirigido a los grandes carteles de Panamericana y que no iba a afectar al pequeño comerciante de Pilar, al que ahora se le está reclamando la deuda.
Por el otro lado, la firma cobra a gran parte de los comercios una suma retroactiva de cinco años por la exhibición de carteles cuando, en algunos casos, los anuncios datan de apenas unos meses.
Pero a pesar de la sorpresa que provoca este hecho entre los comerciantes, la modalidad no sería nueva para la empresa que ya había sido señalada en el 2010 por esta misma situación por concejales radicales en el departamento de San Rafael, provincia de Mendoza.
Según consigna una nota de septiembre del 2010 del portal de noticias mendocino Mdzol, los ediles de la UCR habían presentado un proyecto donde pedían que se rescindiera el contrato de Semcor S.A por “incumplimiento grave y grosero” de la normativa vigente para el cobro del tributo.
“Semcor S.A., la empresa a quien se “privatizó” el servicio de determinación, liquidación, notificación, gestión judicial, emplazamiento y cobranza del tributo (privatización a la que también nos opusimos), ha cometido preocupantes excesos, en un afán de lograr una recaudación voraz que le permita tener utilidades desmedidas. Cabe recordar, que la retribución que el oficialismo acordó por sus servicios, es del orden del 39 por ciento de lo efectivamente recaudado”, explicaba el documento presentado por la UCR de esa región.
“Para incrementar sus acreencias, no ha encontrado mejor idea que practicar liquidaciones que no solo son disparatadas e ilegales. Desde que se ha notificado liquidaciones que se remontan al 2005 y comprenden sucesivamente todos los ejercicios fiscales hasta el presente, estamos sin dudas ante un incumplimiento grave y grosero de la normativa vigente”, expresaban los ediles.
Pero este no es el único paralelismo entre lo que sucede en Pilar y lo que sucede en Mendoza en cuanto a Semcor. Según informó el presidente de Scipa, Daniel Castro, a periodistas de Resumen, tanto Pilar como Mendoza están en una suerte de lista negra de las tarjetas de crédito por la privatización del cobro de la tasa.
Este “mal concepto” ha provocado problemas con la Cámara que nuclea a las tarjetas de crédito, ya que Semcor les cobra un tributo por la exhibición de stickers en el plástico. Esto evita que lleguen descuentos y promociones al distrito.
Mientras lidia con el conflicto y las quejas de los comerciantes, desde Scipa recomiendan a los dueños de los negocios buscar formas de comprobar que colocaron recientemente sus carteles para evitar el pago del retroactivo de un lustro.
En tanto, el tema también es tratado por el Municipio, que años atrás, cuando se había aprobado la privatización del cobro de la tasa, se había comprometido a revisar el contrato de Semcor para evitarle complicaciones a los comercios pequeños, ya que el impuesto apuntaba a las grandes marcas.
“Le llevamos la inquietud al área de Gobierno y están trabajando en eso. Es complicado depender de la buena fe de una empresa privada constituida por abogados que conocen muy bien las normativas”, explicó Castro.
Cabe recordar que la privatización de la tasa había sido aprobada por mayoría en el Honorable Concejo Deliberante en el año 2012. La iniciativa fue para cobrar exitosamente el impuesto a los carteles, ya que le resultaba difícil a la Comuna dar con los dueños de estos anuncios.
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