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En el Día Nacional del Automovilismo Deportivo, el piloto local repasó su nutrida carrera y su actividad actual en el “deporte tuerca”. Recordó las épocas “bohemias” del automovilismo, confesó que hoy “se manejan otros tiempos” y los jóvenes “están acelerados”.
Cada 24 de junio, se conmemora el Día Nacional del Automovilismo Deportivo en homenaje al quíntuple Campeón Mundial de Fórmula Uno Internacional Juan Manuel Fangio, en el aniversario de su nacimiento.
En honor a los grandes corredores, preparadores y mecánicos pilarenses que pasaron por la categoría del automovilismo deportivo más popular del país, Resumen entrevistó a Jorge “El Vasco” Oyhanart.
El vasco nació el 19 de mayo de 1948 en el partido bonaerense de Exaltación de la Cruz, y se inició en el Karting en 1970. Fue quinto en el Campeonato Argentino de Fórmula Junior, y compitió en Fiat Libres 1000, coronándose en 1976. Entre 1977 y 1980 participó en TC del Oeste y obtuvo el campeonato en 1978, para luego, en 1981, dar el salto al Turismo Carretera, donde siempre corrió con la marca Ford.
“Es lindo recordar tiempos pasados, pero no es bueno quedarse en eso. Por eso hoy sigo en la actividad, apoyando a mi hijo Mariano y preparando autos del TC Mouras y TC Pista Mouras”, señaló en declaraciones a “La Mañana de Resumen”, de FM Del Sol (91.5).
Oyhanart desplegó su talento en el Turismo Carretera hasta el año 1992, luego de haber ganado seis carreras y dos subcampeonatos. “Me había prometido que cuando yo mismo considerara que debía dejar de correr lo iba a hacer, y cumplí con mi palabra”, confesó.
Consultado respecto de las épocas doradas del Turismo Carretera, Oyhanart rememoró años donde la actividad se vivía como una verdadera bohemia.
“Vivimos una época que no volverá a repetirse porque hoy en la actividad se manejan otros tiempos. Eran tiempos donde, si bien no había recursos, siempre había amigos que nos daban una mano, como los hermanos Beco, que siempre apoyaron a los pilotos pilarenses”, comentó.
En enero de 1993, se dio otro de los hitos profesionales en la vida de Oyhanart, cuando participó, integrando la “Misión Argentina Roberto Mouras”, en las “24 Horas de Daytona”, una de las carreras más clásicas del mundo entre las de larga duración.
Para esa cita, habían sido alquilados dos Oldsmobile Cutlass del Dale Kreider Racing Enterprise: en el auto nº 25 la conducción estaría a cargo de Emilio Satriano, Eduardo Ramos, Fabián Acuña y Jorge Oyhanart. En tanto, en el nº 23 conducirían Cocho López, Oscar Aventín, Juan Manuel Landa y Osvaldo Morresi. Eran ocho pilotos titulares y un suplente.
En este contexto, es conocida la anécdota que le valió al “Vasco” ser tentado a trabajar en Estados Unidos. “No existía experiencia previa, se realizó un rápido curso de adaptación, y hasta hubo que entenderse en inglés con los mecánicos; aunque finalmente en el momento de la verdad, el "Vasco" Oyhanart copó la parada, y le dio dinámica a la tarea de los boxes”, consignó una publicación especializada de la época.
Sobre la actualidad, sostuvo que “el automovilismo profesional ha cambiado”. “Ahora los chicos quieren quemar etapas y les falta la experiencia de ir subiendo escalones de a poco. Hoy está todo más acelerado, por eso un joven piloto que debuta tiene más posibilidades de perder que de ganar”, cerró el Vasco, con la autoridad de un grande.
Oscar Orlando Mascareño
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