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El intento de ampliar el Parque Industrial ha despertado alarma entre los vecinos que, durante la mañana de hoy se reunieron con autoridades municipales. Los habitantes de la zona esperan impugnar la ordenanza para evitar la extensión.
Tras la carta enviada por Juan Freixas donde acusaba al Jefe Comunal de ser “el intendente de la contaminación” y expresar que el Parque Industrial tiene un alto nivel de contaminación y se encuentra fuera de control, los vecinos se reunieron hoy por la mañana con las autoridades municipales. Cerca de las 10 de la mañana se llevó a cabo el encuentro entre los habitantes de la zona, Juan Pablo Martignone, Jefe de Gobierno municipal y Claudia Zakhem, concejal del oficialismo. Por su parte, Juan Pablo Caputo, subsecretario de Planeamiento Urbano, no se hizo presente a pesar de haberse comprometido a asistir.
“Se abrió un diálogo, en el sentido que nos facilitarán el nuevo Código de Planeamiento, el proyecto, para que lo analicemos de forma conjunta. Además, tendremos una reunión con los concejales que lo tratarán porque realmente afectan. Estamos interesados en ver cómo se plantea la problemática, para llegar a que no se convierta en Parque Industrial por la gran contaminación”, comentó la abogada Soledad Puerta, quien estuvo presente en la reunión a Diario Resumen.
La idea principal es impugnar la ordenanza, ya que afirman que “la contaminación que genera el Parque ya es suficiente” pero la letrada no dudó en asegurar que se seguirán todos los pasos correspondientes para lograrlo “por la vía legal”. “Continuaremos los reclamos a nivel administrativo y veremos de iniciar una acción judicial para poder estar amparados. Mantendremos el respeto mutuo, pero hay que representar a los vecinos. El canal de diálogo sigue abierto y la idea es tener mayor participación ciudadana en la toma de decisiones en aquello que nos afecta”, dijo.
La letrada ratificó lo expuesto por Juan Freixas durante la carta, especificando que la contaminación que genera el Parque Industrial es un problema de larga data, lo preocupante es que “no lo pueden controlar y se va a ampliar, generando más contaminación”. “Los arroyos están con agua color azul, a la gente se les pudren los mosquiteros, deben cambiar camionetas de las empresas porque se pudren, hay zonas en las que no hay animales, ni mosquitos. Hay una contaminación elevada, uno lo ve, aunque no es especialista. Los mismos hechos te muestran el grado de contaminación”, denunció.
“Lo que proponemos es que, aquellas empresas que están contaminando se vayan y den lugar a aquellas que estén en una mejor situación, es la alternativa a la ampliación cuando hay empresas que funcionan mal”, concluyó.
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