Fénix dio otra triste imagen y sufrió otro duro cachetazo

En el estadio Carlos Barraza, el Cuervo cayó 3-0 ante Tristán Suárez y sumó su quinta derrota consecutiva, la séptima en los últimos ocho partidos. Igartúa, Bottino e Imperiale anotaron los goles del Lechero, que golpeó de entrada y no sufrió ante la pálida alineación pilarense. La caída libre de Fénix no se detiene. Por la 13° fecha de la Zona A del Torneo de Transición de la Primera B Metropolitana, el Cuervo cayó 3-0 ante Tristán Suárez. Así, sumó su quinta derrota consecutiva, la séptima en los últimos ocho juegos, y acumula cuatro partidos sin marcar goles. Nicolás Igartúa, al inicio del partido, Gastón Bottino y Andrés Imperiale anotaron los goles del Lechero, que ganó sin despeinarse ante un pálido equipo pilarense. Sin tiempo para lamentos, Fénix debe prepararse para enfrentar el próximo sábado a las 13:05 a Colegiales en Munro, con televisación de TyC Sports. En detalle Tal como viene ocurriendo en los últimos partidos, Fénix comenzó con el pie izquierdo. Bastaron 5 minutos para que Tristán Suárez vulnere la débil defensa local: Elvio Friedrich envió el centro al área chica, Mariano Mittelman no salió y Nicolás Igartúa anticipó a los centrales para definir al gol. Con la ventaja, el Lechero retrocedió en el campo de juego y le cedió terreno y pelota al Cuervo, que poco pudo hacer para dar vuelta la historia. La principal arma del equipo de Gabriel Pedrazzi fue la pelota parada. Por esa vía, a los 16 minutos, tuvo la primera chance: Emiliano Ronconi envió el centro, Gonzalo Gil la peinó y la pelota se fue cerca del palo derecho. Cuatro minutos después, el volante volvió a meter la pelota al área, el balón picó y obligó a la estirada de Gastón Losa. La respuesta del Lechero llegó a los 31 minutos, cuando Igartúa habilitó a Facundo Diz, que la quiso picar por encima del arquero. Mittelman lo esperó y se quedó con la pelota en sus manos. La más clara para el Cuervo se registró a los 39 minutos. A la salida de un lateral de Martín Zúccaro, Gil y Santiago Bianchi (que entró por el lesionado Jesús Díaz) acortinaron la aparición de Rivero, que entró por el centro y remató muy desviado. Un minuto después, Leonel Bargas desvió un cabezazo. Y para cerrar una primera mitad olvidable, Fénix se quedó con diez: Rivero, de pésimo nivel, le dio un codazo a Talín y se ganó la incuestionable expulsión. En el complemento, lejos de dar respuestas futbolísticas, físicas o anímicas, el Cuervo lució entregado. Más aún cuando a los 9 minutos, Friedrich envió un centro cruzado desde la izquierda para Gastón Bottino, que aprovechó una enorme desatención defensiva –Tissera y Zúccaro no siguieron la jugada por pedir un offside inexistente- y definió solo. Con el 2-0, Fénix se derrumbó y jugó aún peor. Tristán Suárez reguló, jugó a media máquina y, así, llegó al tercero. A los 24 minutos, Andrés Imperiale encaró casi sin resistencias desde el medio hacia el área del Cuervo y la “picó” ante la salida de Mittelman para ponerle cifras definitivas al juego. Sobre el final, el Lechero podría haber aumentado el marcador en los pies de López y en la cabeza de Diz, pero no tuvo puntería. La imagen final, con el silencio dentro y fuera de la cancha, habla a las claras del momento duro de la institución.