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Así lo afirmó Fabián Oroño, presidente del Colegio de Farmacéuticos local. Dieron un plazo de siete días para cobrar los fondos. La situación se magnificó a nivel provincial.
En la jornada de hoy, el Colegio de Farmacéuticos del distrito anunció que, en los próximos días, podrían cortar el suministro de medicamentos a la obra social PAMI, por una deuda que mantienen los laboratorios.
La falta de cumplimiento con los pagos de los medicamentos que se entregan a través de la prestataria generó las probables medidas de inacción, que perjudicaría notablemente a los afiliados.
La situación es igual en toda la provincia, al punto que desde el ente que engloba a todas las farmacias bonaerenses, evalúan seriamente restringir y quitar las prestaciones.
Ante esta situación, los demandantes otorgaron un plazo hasta el jueves de la próxima semana, para que la industria farmacéutica se ponga al día con los pagos. De lo contrario, las medidas serían urgentes.
El presidente de los farmacéuticos locales, Fabián Oroño, remarcó en diálogo con “La Mañana de Resumen”, de FM Del Sol (91.5), la perversidad del sistema, ya que son los propios laboratorios los que cobran el 14 por ciento de las ventas que se realizan a través de la obra social, y no expiden las notas de crédito correspondientes.
“El 90 por ciento de los medicamentos que se entregan por PAMI, son sin cargo y al no recibir el pago de parte de la industria, las farmacias más pequeñas cuentan con graves problemas económicos”, explicó.
Asimismo, cabe destacar que el sistema que rige para el manejo de PAMI, está a cargo de los grandes laboratorios de la industria farmacéutica, es decir, de los mismos que venden medicamentos a las farmacias.
Así, para prestar el servicio los comerciantes deben deducir el 14 por ciento de las ventas y entregarla a las mismas firmas que luego los proveen. Sin embargo, una vez que el farmacéutico entregó el medicamento, este conglomerado de potencias de la industria que conforman Farmalink, debe devolverles el 84 por ciento del valor.
En tanto, la devolución que debe realizar Farmalink, ni siquiera es en efectivo, sino en nota de crédito, pero las últimas emitidas hacia los comerciantes corresponden al mes de marzo, por lo que la demora alcanza ya varios meses.
Dicho retraso provoca que, entre la inflación y los gastos que tiene el comerciante, meses más tarde reciba un valor totalmente desfasado de lo que pagó por el medicamento que entregó.
Por otra parte, el representante pilarense aseguró que, pese a las reiteradas promesas por parte de los laboratorios, que aseguran constantemente que cancelarán las obligaciones en tiempo y forma, estos no cumplen con la promesa y luego se excusan culpando a las autoridades del PAMI.
“Nosotros haremos todo lo posible para sostener la prestación en todo el distrito, pero si hay una decisión provincial de cortar el servicio, acataremos”, señaló.
Según señaló un comunicado lanzado por el colegio provincial, de concretarse la medida de fuerza, las 4.500 farmacias que hay en territorio bonaerense dejarán de dispensar los medicamentos de los pacientes ambulatorios afiliados al PAMI.
En tanto, Oroño enfatizó que “el sistema es nefasto y perverso para los afiliados, para el Estado y para los farmacéuticos”.
En ese sentido, concluyó que sólo el gobierno nacional puede terminar con ese sistema, y aclaró que desde el Estado se cumple con la parte que debe darse, pero los laboratorios que conforman Farmalink no lo hacen.
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