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La prestataria desoyó los reclamos de la madre de la menor, que necesita estar conectada a una bomba de alimentación durante varias horas al día. “Fui bastante mal atendida porque ninguno pensó en el problema que estamos pasando”, señaló Érica Hahn.
Las quejas contra el servicio prestado por la empresa Edenor se reiteraron esta semana en Villa Astolfi, luego de una grave situación que tuvo como epicentro a Érica Hahn y a su hija, que es paciente oncológica.
El pasado jueves, luego de 72 horas sin electricidad y más de un mes después de comenzar con los reclamos ante la prestataria, se realizaron las reparaciones correspondientes con el agravante de que la menor precisa de energía eléctrica para poder así alimentarse con una bomba.
“Ayer a la mañana vinieron los de Edenor, que si no estaba atenta y los veía se iban diciendo que estaba todo bien. El problema de mi casa es que el pilar donde estaba la perillita que da luz estaba muy sensible y con cada trueno o cuando pasaba un auto por la calle se cortaba el servicio”, comentó Hahn al programa “La Mañana de Resumen”, de FM Del Sol (91.5).
“Estuve reclamando hace más de un mes, ellos vinieron y dijeron que el problema lo tenía mi casa. Llamé al arquitecto y a un electricista matriculado y me dijeron que no, que el problema era la perilla”, criticó.
Asimismo, la damnificada señaló: “Reclamé durante tres días, a más de 24 reclamos por día, avisando que tenía un paciente oncológico conectado a una bomba y Edenor no venía. Inclusive, después ellos decían que nunca había avisado que tenía un paciente oncológico, y lo último fue decirme que tengo que ir con todos los estudios de mi hija para demostrarlo”.
“Me parece que no está bien, porque cuando se corta la luz en algún lado, ellos tienen que solucionarlo, tengas un paciente o no. Puse una solicitada en mi Facebook y todos mis contactos estuvieron llamando y molestándolos un poco para ver si se disponían a actuar. Igualmente lo hicieron muy tarde”, graficó.
En estas circunstancias, Hahn comentó que estuvo todo el fin de semana sin servicio, “colgada a un vecino en una conexión peligrosa por la lluvia a través de un cable muy largo, pero así estuve con luz estos tres días para alimentar la bomba que mi hija necesita”.
Según explicó, su hija necesita el servicio eléctrico porque “al estar haciendo quimioterapia está con un problema de nutrición, lo que le produce no poder comer. Entonces, está conectada a una bomba de alimentación y tiene que hacer cuatro tomas diarias de una leche especial muy nutritiva, y está conectada dos horas por cada toma. Además, a la noche está conectada siete horas porque se le pasa una leche distinta”.
“Era imposible quedarme sin luz porque ella lo necesitaba. En nuestro barrio siempre se corta porque muchas veces se roban los transformadores, como en todos lados, pero hace más de un mes que estamos con este problema, y nos dijeron que era otro cuando simplemente había que cambiar esa perillita”, lamentó.
Finalmente, Hahn señaló que irá a Defensa del Consumidor, “porque no pueden abandonar a un paciente oncológico ni a nadie, avisando siempre que se hizo el reclamo que había una persona con esta necesidad. A nadie le importó el tema, y considero que fui bastante mal atendida porque ninguno pensó durante un segundo en el problema por el que estamos pasando”.
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