El piloto con gran experiencia, volvió a subirse a un TC después de 7 años. “Estoy feliz de haber estado en esta fiesta” aseguró luego de haber asistido gracias al llamado de Facundo Gil Bicella.
La magia que solo puede provocar el Turismo Carretera. El fin de semana se vivió una verdadera fiesta, con el autódromo Oscar y Juan Gálvez repleto de personas (más de 60 mil) y 44 autos en pista, los cuales corrieron por más de 5 horas y media, completando el circuito largo 178 veces.
La cita que celebró los 80 años del TC fue con pilotos invitados por lo que se vio varios debutantes como así también, históricos regresos. Uno de esos casos fue el de Roberto Videle, que llegó como invitado de Facundo Gil Bicella y a su vez, compartió butaca con Mariano Oyhanart. “Fue emocionante. Estoy feliz de haber estado en esta fiesta, todavía no lo puedo creer” dijo el Chiqui a este medio.
“Nunca en mis 16 años dentro del TC había corrido una carrera de esta magnitud. Fue muy exigente. Nosotros penamos en las primeras vueltas cuando se cortó la correa de distribución, pero fue suerte. Hay muchos que no pudieron solucionar sus inconvenientes”, señaló. A pesar de haber sobrellevado esa situación, la rotura del diferencial fue el problema cuando restaban 25 vueltas para culminar. “De esa no zafamos. Sin embargo los tres nos vamos contentos porque todos pudimos girar”, contó el chiqui.
No obstante, sin que los protagonistas se percataran de lo que estaba sucediendo, Roberto y su hijo Marcelo se enteraron que ambos estuvieron en pista al mismo tiempo, algo que no había sucedido nunca.
“Cuando nos dimos cuenta no lo podíamos creer. Competir y encima contra mi hijo fue una experiencia inolvidable. Esto va a quedar para siempre en mis recuerdos”, concluyó.
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