Visitó a Independiente y lo arrolló para ganarle 88 a 55. Perdiendo la revancha hasta por 32 dará la vuelta olímpica. Expósito fue goleador con 27 puntos.
Presidente Derqui quedó a un paso de conquistar su segundo título de Primera división desde que juega en el ámbito de la Asociación de Básquet Zárate-Campana (ABZC) al golear como visitante a Independiente de Zárate por 88 a 55 en el juego que abrió la serie final del torneo Oficial.
El duelo se llevó a cabo en la noche del último viernes en el gimnasio zarateño y Derqui sumó un triunfo vital porque además, en una serie a dos encuentros, los 33 puntos de distancia lo dejaron con la copa al alcance de la mano.
Los dirigidos por Esteban Sánchez sacaron diferencias desde el primer cuarto pero el quiebre se dio en el segundo capítulo, cuando con un parcial de 24 a 9 tomó distancias que se tornaron inalcanzables.
El juvenil Lautaro Expósito fue el goleador del partido con 27 puntos, mientras que el versátil Juan Ignacio Baquero lo secundó con 26. En el Diablo, que sufrió algunas ausencias de peso, sobresalió Pracchia con 27.
El partido de vuelta de la llave se jugará el viernes en Derqui y allí con otra victoria o perdiendo hasta por 32, el Rojinegro sumará su segunda estrella en el año, luego de la histórica consagración en el último Provincial de Clubes.
La acción
El partido que muchos imaginaban, cerrado y parejo, solo se sostuvo durante los primeros 10 minutos aunque tras ese lapso y de la mano del terceto Expósito-Baquero-Alejandro Irigoyen (18), la visita tomó la primera diferencia (21-14).
Lo mejor del Rojinegro se vio en el segundo tramo, cuando secó por completó al artillero zarateño Garín Palacios y en ataque se mostró productivo desde todos los sectores del campo para irse al descanso largo venciendo 45 a 23.
Independiente se jugó las últimas fichas en el tercer período pero Derqui nunca perdió el foco y a los 10 finales ingresaron con triunfo pilarense por 72 a 40, con olor a partido (y serie) definida. El dueño de casa echó el resto en el cierre pero Derqui no solo bancó la parada sino que elevó la diferencia y completó el juego con la tranquilidad del trabajo realizado y la ansiedad de querer dar ya una nueva vuelta olímpica.
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