Para una familia oriunda de Rosario el paso por nuestro distrito resultó ser una pesadilla. Así lo relata Maira Rosso, una mujer que por un accidente que tuvo su padre cuando visitaba a uno de sus hermanos, viajó hasta Pilar y se encontró con una escena que describió como “terrorífica”.
Todo comenzó el jueves 21 se septiembre luego de que Juan Rosso se cayera dentro del depósito en el que trabaja su hijo, ubicado en Ruta 8 y Chile, en La Lonja. Rápidamente, llamaron a una ambulancia para que trasladaran al hombre de 67 años que acaba de sufrir un golpe en su espalda al hospital más cercano. “Desde ese momento fue todo terrorífico. Lo llevaron al hospital Juan Sanguinetti y al llegar, queda en una sala de guardia sobre la camilla de traslado por más de 30 horas, sin el cuello protector, sin analgésicos, sin sondas vesicales, se había vomitado, nadie lo limpiaba”, explicó Maira Rosso a Diario Resumen.
“Apenas ocurrió todo, no podíamos entrar a verlo. El viernes por la mañana decidí viajar”, dijo y agregó que, al llegar al Sanguinetti, se le negó a ella también la posibilidad de ver a su padre, pero, finalmente, tras una discusión con los empleados, logró estar junto a Juan. “Mi papá tuvo una lesión que se trataría en terapia porque tuvo una acepción de la médula a nivel de la C3 y C4. Si o sí tendría que estar en terapia, porque puede hacer un paro respiratorio, un shock medular. Todo esto, él lo pasó sin atención”, acotó.
El viernes 22 siguiente, Maira vio a su padre en el medio de una sala de guardia, llorando del dolor mientras una médica le daba el alta “porque la tomografía le dio bien al igual que los análisis” y le ofrecía llamar un remis si no había ido en un vehículo hasta allí. “Fue ahí cuando lo revisé y les dije que algo pasaba. Me negué al alta, y me llamaron una ambulancia. De noche, levantó fiebre, y nadie lo atendía. Tras implorarlo, le realizaron estudios y determinaron que tenía infección urinaria”, continuó.
Aun así, el calvario no terminó para la familia Rosso, puesto que el sábado tuvo el alta médica, pero al llegar a la vivienda de La Lonja, Maira observó que su padre no se movía correctamente, tenía dificultades para respirar y el vientre duro. A la madrugada del domingo, Juan volvió a la guardia del hospital Sanguinetti con un edema pulmonar, producto de una “recarga de la vejiga” y Maira no dudó en contar que tanto ella como su padre fueron víctimas de maltrato por parte de los médicos y enfermeras del hospital. “Tienen falta de recurso humano. No querían permitir el traslado a Rosario y seguían sin darle importancia a que su cuerpo estaba paralizado de la cervical hacia abajo”, destacó.
Finalmente, el lunes por la noche Juan llegó a Rosario, fue tratado luego de recuperarse de una bacteria en la sangre que se contagió en el Sanguinetti, y fue operado. “Todavía está postrado, esperando la rehabilitación, internado. El atraso y mala atención, nos trajo esto. Comenzaré acciones legales”, afirmó. “Era un descuido total, parecía un hospital de campaña, de guerra. Fui a rescatar a mi papá, porque sino, me lo llevaba muerto”, sentenció Maira.
Versión oficial
“Es importante que se sepan estas cosas, el testimonio del familiar es más que importante para evaluar estos casos. Estamos investigando qué sucedió, ya hemos pedido la historia clínica. Sugerimos a la familia que se acerque a la dirección del hospital, para explayarse en los detalles y contar qué pasó, así se realiza el reclamo y, podremos tomar cartas en el asunto”, expresó Mariela Paz, Secretaria de Salud del Municipio.
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