Jueves 21 de Noviembre de 2024

Avanza la licitación para obras de desagües pluviales en el centro de Pilar

La Provincia de Buenos Aires avanza con la licitación, con una inversión de 7 mil millones de pesos. El proyecto busca canalizar las aguas de lluvia hacia el Canal Agustoni, solucionando problemas históricos de inundaciones en la zona urbana.


  • Martes 17 de Septiembre de 2024
Desagües Pilar Centro

El Ministerio de Obras y Servicios Públicos de la Provincia de Buenos Aires anunció el avance en la licitación de un ambicioso proyecto de desagües pluviales en el centro de Pilar, cuyo objetivo es mitigar los problemas de inundaciones que afectan a la ciudad durante las lluvias intensas. El proyecto, que cuenta con una inversión base de 7 mil millones de pesos, busca ordenar los escurrimientos superficiales y canalizar las aguas pluviales hacia el Canal Agustoni, un sistema clave en el saneamiento hídrico de la zona.

Las obras, que se prevé serán ejecutadas en un plazo de 360 días, contemplan la construcción de dos conductos troncales subterráneos que captarán las aguas de dos subcuencas principales. Estos conductos transportarán el agua hacia el cruce con la Panamericana, y desembocarán en el Ramal 1 del Canal Agustoni, una obra de entubamiento que atraviesa la ciudad.

Guillermo Jelinski, subsecretario de Recursos Hídricos de la Provincia, destacó la importancia de esta obra para Pilar: “Se trata de una obra fundamental que nos va a permitir sanear el centro de la ciudad de Pilar, quedando saneada toda la zona del Canal Agustoni”.

Actualmente, los desagües se realizan de manera superficial en la mayoría de los tramos, lo que genera inundaciones en las áreas más bajas del casco urbano. Con la ejecución de estos trabajos, el drenaje pasará a ser subterráneo, mejorando significativamente el escurrimiento de las aguas.

El proyecto incluye la construcción de dos troncales principales: el Troncal Ituzaingó y el Troncal Uruguay. Ambos cruzarán las rutas provinciales 8 y 25, y contarán con varios ramales secundarios para canalizar las aguas. El Troncal Ituzaingó tendrá ocho ramales, mientras que el Troncal Uruguay contará con tres.

El conducto principal del proyecto Ituzaingó tiene una longitud total de 930 metros, con diámetros que varían entre 0,8 y 1,2 metros. Comenzará en la calle San Martín y se extenderá hasta la Ruta Provincial N° 8, pasando por varias calles clave del centro de Pilar, como Independencia, Hipólito Yrigoyen y Estanislao López. Este troncal también contará con sumideros y cámaras de inspección para facilitar el mantenimiento y control del sistema.

Por su parte, el proyecto del Troncal Uruguay, más corto en comparación, tendrá una longitud total de 415 metros y cruzará la Ruta Provincial N° 25, extendiéndose desde la calle 25 de Mayo hasta la intersección con la calle Brasil, donde se conectará con el Ramal 1 del Canal Agustoni.

El plan contempla también la construcción de alcantarillas y otros dispositivos para asegurar el correcto drenaje de las aguas de lluvia hacia el canal principal. Estas obras no solo garantizarán un mejor escurrimiento de las aguas pluviales, sino que también contribuirán a prevenir las inundaciones que históricamente afectan a Pilar.

El impacto de la obra en Pilar

Este proyecto surge como una respuesta a la demanda del Municipio de Pilar, que desde hace años busca soluciones definitivas a los problemas de escurrimiento superficial en el área urbana. La intervención permitirá ordenar los desagües pluviales de manera efectiva, mejorando la calidad de vida de los habitantes y reduciendo los riesgos de anegamientos en la zona centro.

Carlos Bianco, ministro de Gobierno bonaerense, subrayó la importancia de este tipo de obras públicas para la provincia: “A diferencia del gobierno nacional, creemos que la obra pública es tremendamente necesaria para solucionar deficiencias que todavía tiene la Provincia. Somos conscientes de las necesidades del pueblo bonaerense y del mandato que nos han dado para continuar con la obra pública en nuestra provincia”.

El inicio de las obras, que habían sido licitadas en 2022 pero quedaron truncas, marca un hito en el proceso de saneamiento hídrico de Pilar, una necesidad imperiosa que ha sido postergada durante años. Con este avance, Pilar da un paso decisivo hacia la resolución de uno de sus problemas históricos más acuciantes: las inundaciones en su casco urbano.

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