Apuntan contra el Municipio ante la falta de definición por el posible terreno tomado

Moisés Sosa, apoderado del supuesto dueño legítimo del predio, refirió que los aparentes usurpadores contarían con un contacto en la Comuna para no ser apartados del lugar. Informó que no se cumplió con la orden del HCD de abrir la calle Argerich. El conflicto del terreno de la calle Argerich, del barrio Pellegrini, suma una nuevo capítulo a su enmarañada trama. Moisés Sosa, apoderado de Manuel Fernández, supuesto dueño legítimo del predio, ahora disparó contra el Municipio por no tomar cartas en el asunto a pesar que el legista habría presentado todos los documentos necesarios para concretar el desalojo de la familia que allí vive. Las declaraciones del abogado se suscitaron al aire del programa radial “La Mañana de Resumen” de FM Del Sol (91.5). Expresó que luego de meses de tratativas y visitas a la Fiscalía, todavía no se tomó ninguna decisión al respecto y que esto beneficiaría a la familia que, según Sosa, vive ilegalmente en el predio ya que carecerían de títulos que los acrediten como propietarios de la parcela. Pero la acusación contra las autoridades locales va más lejos. El abogado también informó que no se llevó a cabo la apertura de la calle Argerich, a pesar de que el Honorable Concejo Deliberante había aprobado la iniciativa que permitía la entrada de la máquina en el predio. “Eso fue más o menos como cuando nos dijeron que les habían robado la topadora. Es increíble cómo se pasan la pelota de un lado a otro. Esta gente dice que tienen testigos que comprueban que viven ahí desde hace más de 20 años. De todas formas, no tienen papeles y no pagaron los impuestos. Evidentemente tienen algún arreglo con alguien del poder o del Municipio”, aseguró. “La familia me dijo que quiere comprar los terrenos, y estaríamos encantados de vendérselos, pero no nos han hecho ninguna oferta concreta. El señor Fernández, mi representado, necesita el dinero por problemas de salud”, cerró Sosa. El sueño truncado El sueño de la casa propia de Nicolás Aguilera y Gimena Serrano había sufrido la postergación que temían. La pareja había recibido el crédito Procrear para construir su hogar, pero un gran escollo se hizo presente en el camino cuando descubrieron que el terreno donde se planeaba edificar estaba bloqueado por ramas y plantas. Cuando el personal municipal intentó abrir el paso a la parcela ubicada sobre la calle Argerich del barrio Pellegrini, fueron amenazados por supuestas usurpadoras del lugar. Luego de muchas idas y venidas, la problemática no encontró la pronta solución que requería y el Banco Hipotecario archivó la solicitud de la pareja. Ante esta situación, y a pesar de contar con el apoyo de Sosa, la pareja se tuvo que dar a la búsqueda de un nuevo terreno con todo el tiempo y complicaciones que ello implica sin mencionar la cantidad de dinero que ya habían gastado.