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Este jueves, los gremios docentes llevarán a cabo un paro de 24 horas en todos los niveles del sistema educativo, en protesta por el atraso salarial y la falta de convocatoria a la paritaria nacional del sector por parte del Gobierno de Javier Milei. La medida de fuerza, que impactará en todos los niveles educativos, fue acordada tanto por los cuatro gremios docentes de la CGT (UDA, AMET, CEA y Sadop) como por la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera).
Dentro de Ctera se encuentra Suteba, uno de los sindicatos más influyentes de la provincia de Buenos Aires. Es crucial observar si el otro sindicato significativo de la provincia, la FEB, seguirá el mismo camino, como lo ha hecho en ocasiones anteriores este año. Asimismo, entre los gremios pertenecientes a la CGT se encuentra Udocba, que también tiene representación en escuelas de toda la provincia de Buenos Aires.
El principal reclamo de los docentes radica en que el salario mínimo de la paritaria nacional permanece estancado en $250.000 desde diciembre, mientras que el pedido es que se eleve a $450.000. A pesar de ello, la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, no ha respondido a la solicitud de reanudar las negociaciones.
Entre otros reclamos se incluyen la restitución del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), cuya eliminación ha supuesto una reducción salarial del 10% al 20%, el financiamiento adecuado para escuelas y universidades públicas, el envío de recursos para infraestructura escolar y comedores, y la oposición al traspaso de las Cajas Provinciales a la Nación.
El paro tendrá repercusiones en todos los niveles del sistema educativo: inicial, primaria, secundaria, técnica, institutos de educación superior y nivel universitario. Cabe destacar que este último sector ya había convocado a un paro para el jueves y una jornada de visibilización del conflicto un día antes.
En la provincia de Buenos Aires, el paro tendrá un fuerte impacto debido a la participación activa de gremios influyentes como Suteba y Udocba. La medida afectará a una gran cantidad de instituciones educativas, desde jardines de infantes hasta universidades, generando una significativa interrupción en el normal desarrollo de las clases.
Las familias y estudiantes de la provincia deberán prepararse para un jueves sin actividad escolar, mientras los gremios buscan presionar al gobierno nacional para que atienda sus demandas salariales y de mejoras en las condiciones laborales y de infraestructura. La unidad demostrada por los diferentes gremios docentes refleja la gravedad de la situación y la necesidad urgente de un diálogo abierto y constructivo con las autoridades.
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