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Los gremios exigen un aumento del 40 por ciento. Por el momento, la Provincia no lanzó una oferta concreta. Solo se delineó las formas que la posible mejora salarial podría adoptar.
Sin una oferta concreta, el Gobierno bonaerense y los gremios estatales retomaron el martes las negociaciones salariales. Fue en la primera reunión de la mesa técnica salarial para debatir los aumentos para lo que resta de 2015, en el que se propuso efectuar pases a planta permanente de los empleados temporarios.
Al igual que en la reunión que la administración provincial mantuvo el miércoles pasado con los docentes, esta vez tampoco hubo una cifra concreta de aumento salarial, sino que se delinearon las posibles formas que la mejora podría tener.
Se trata de la discusión paritaria para definir la pauta salarial de los trabajadores bonaerenses regidos por la ley 10.430 para marzo y el resto de 2015, luego de la suba del 7 por ciento acordada para los meses de enero y febrero, que se complementó con un cambio de categoría.
En el encuentro participaron funcionarios de los ministerios de Economía y de Trabajo y representantes del área técnica de los gremios que tienen representación en la paritaria provincial.
Desde la Provincia realizaron un repaso de las variables macroeconómicas y advirtieron que en el país existe una “desaceleración” de la inflación en base a las cifras del Indec y una proyección a la baja de los ingresos fiscales por la caída internacional del precio de la soja.
Además, avanzaron en tres ejes: “el pase a planta de trabajadores temporarios mensualizados, reconocimiento de derechos para aquellos que ocupan cargos interinos con función jerárquica, y contemplar la nueva categoría en los haberes jubilatorios de los trabajadores que están pronto a jubilarse”.
Los gremios rechazaron el diagnóstico y encendieron luces de alerta. “Nos hablaron del 24,9 de inflación. Creemos que la propuesta salarial del Gobierno va a andar en esas variables porque si no, no hubieran salido con ese planteo” señaló el dirigente de Fegeppba y secretario general de AERI, Jorge Baldovinos, al salir del encuentro.
Otra advertencia que hicieron los gremios, fue la de que toda suba que se pacte debe contener un fuerte impacto en el salario básico y el blanqueo de sumas irregulares, para que el incremento repercuta proporcionalmente en todas las categorías y regímenes así como en el sector pasivo.
Desde ATE manifestaron que seguirá exigiendo en la mesa de negociaciones la recuperación del poder adquisitivo perdido por los trabajadores durante 2014 y pedirá que la oferta contemple la proyección inflacionaria para el año 2015, que es de entre el 40 y el 43 por ciento.
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