La dilación se dio luego de roces entre el Frente Para la Victoria y el Frente Renovador. Mañana volvería a debatirse en la Cámara alta. Si no hay consenso, la iniciativa podría quedar estancada.
El proyecto de las policías comunales se vuelve a teñir de trabas y polémica. Luego de lo que fue la dilación de la semana pasada, el lunes volvió a retrasarse el tratamiento de la iniciativa que sería debatida mañana.
Las dos fuerzas principales que integran la Cámara alta, el FpV y el FR, no consiguieron destrabar el avance del debate para poder bajarla al recinto y ahora el Frente para la Victoria (FpV) mantiene la expectativa de lograrlo en la sesión convocada para mañana. Sin embargo, para lograrlo, necesita el acompañamiento del massismo con los dos tercios.
En ese sentido, el diputado nacional y líder del Frente Renovador, Sergio Massa, anticipó que su fuerza “va a apoyar y acompañar aquellas cosas que están bien, y rechazar aquellas que vemos mal”.
Fue en el marco de las especulaciones que indicaban la posibilidad de que ese sector decidiera votar contra la norma, ante la posibilidad de no tener los números para lograr modificar los artículos a los que se opone.
La ley para crear fuerzas de seguridad para municipios de más de 70 mil habitantes, controladas por los intendentes, se encuentra en medio de un fuerte tironeo que podría derivar en su sanción definitiva o en su estancamiento.
Desde el FpV insisten en que apuntar a modificaciones de los artículos obligaría a reenviar el proyecto a la Cámara de Diputados, donde “no saldría más”. Con 19 legisladores y el apoyo de dos monobloques, el FpV apunta a sancionar la norma en general y en particular sin cambios, enfrentándose a los 20 senadores del massismo, que contarían con el apoyo de Mario Ishii, para modificar el articulado.
Pero en ese posible escenario, en el que el FAP Unen votaría en contra en general y se abstendría en particular, el oficialismo cuenta con el desempate del voto doble del vicegobernador, Gabriel Mariotto.
No obstante, aún no se extingue la posibilidad de que el radicalismo vote también en contra en lo particular, lo que conduciría a que el massismo lograra la modificación del articulado y regreso a la Cámara baja. El panorama se presenta así de un modo en el que un voto marca la diferencia y la polémica creación de la nueva fuerza o que se estanque definitivamente.
“Después de debatirlo durante dos años en los medios, queremos debatirlo en el recinto, y una vez que tengamos esa posibilidad, vamos a ver qué número tenemos para su sanción”, dijo la jefa de la bancada Cristina Fioramonti, en una conferencia de prensa brindada por el FpV.
Dejar un comentario