Según una encuesta del estudio de Ricardo Rouvier, el precandidato a gobernador se colocó a 4,9 puntos de su rival, Aníbal Fernández. Los especialistas afirmaron que cuenta con mayor proyección de voto por tener un menor nivel de instalación.
Esta semana, se publicó una nueva encuesta de cara a las carrera por la gobernación de la Provincia de Buenos Aires, y los datos ofrecieron una realidad ajustada entre la candidata de Cambiemos, María Eugenia Vidal, y los dos candidatos del Frente para la Victoria, Aníbal Fernández y Julián Domínguez.
Si bien en términos de candidaturas el estudio de Ricardo Rouvier muestra a María Eugenia Vidal encabezando la intención de voto con el 26,4 por ciento, seguida de Aníbal Fernández con 20,7, Julián Domínguez con 15,8 y Felipe Solá con 14,8; es el Frente Para la Victoria quien lidera las preferencias de los bonaerenses con el 36,5 por ciento de los votos y a mas de 10 puntos de la candidata del PRO.
Pero el dato a no pasar por alto es el crecimiento de Domínguez en intención de voto, ya que hay que tener en cuenta que al momento del anuncio de las formulas el candidato de Chacabuco estaba cuarto en las preferencias, detrás de Felipe Solá y a una distancia de 13 puntos con su competidor interno Aníbal Fernández.
La encuesta de Ricardo Rouvier, realizada la primer semana de julio, muestra un crecimiento de más de cuatro puntos porcentuales para la fórmula Domínguez-Espinoza y una merma de 4 puntos para la de Fernández- Sabbatella, achicando significativamente la diferencia con la otra fórmula del FPV de 13 a 5 puntos en tan solo un mes.
Los especialistas afirman que el acercamiento de 8 puntos entre ambos candidatos del FPV se debe a que, en la medida de que el nivel de conocimiento de Domínguez crece en la provincia de Buenos Aires su intención de voto se incrementa, siendo el candidato con mayor proyección dentro de la propuesta electoral porque continúa teniendo un menor nivel de instalación pero es el de mejor imagen positiva de los candidatos a gobernador.
Este sondeo confirma los pronósticos de otros encuestadores (Ibarometro, Aurelio, Aragón) que en estudios de hace dos semanas publicados en distintos medios de comunicación pronosticaban proyecciones favorables para el binomio Domínguez-Espinoza en la medida que creciera su nivel de instalación. Ya que luego del cierre de listas mostraban que esta fórmula ya achicaba su diferencia con la de Fernández-Sabatella, a una distancia de alrededor de 7 u 8 puntos según la firma, y la colocaba en la fórmula del FPV que mayor absorción de voto K habían conseguido con la consolidación de las fórmulas.
La encuesta de Rouvier intensifica esta proyección que se va transformando en tendencia con el paso de las semanas y que nos hace pensar en un final abierto en la provincia de Buenos Aires.
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