La edil del bloque massista explicó que el delito no se ha desplazado, sino que está en todos lados y atribuyó los conflictos a la falta de comunicación entre el Municipio y los vecinos.
En medio de la espera por la re-inauguración de la mítica calesita derquina, la concejal Inés Ricci, que se ha metido de lleno en la causa, al igual que la erradicación del basural que se encuentra en el límite de José C. Paz y Presidente Derqui y la disposición de un anexo para el Banco Provincia pilarense, dio su opinión tras los dichos del intendente Nicolás Ducoté respecto al “desplazamiento del delito” desde zonas vulnerables al centro pilarense “por la presencia policial”.
“El delito no creo que se desplace, el delito está en todos lados. Donde esté la oportunidad de robar, el que delinque va a tomarla. Lo que hay que hacer, además de tener más móviles, más personal, mejor división de cuadrículas, es verificar las leyes, que no son tan fuertes”, explicó la edil del bloque massista, Inés Ricci. Además, agregó que termina ocurriendo el famoso “entra por una puerta y sale por la otra” debido a la problemática con la ley. “En cuestiones de violencia de género, se le da prioridad al hombre y no a la mujer que sufre violencia”, afirmó.
Sin embargo, atribuyó el problema de inseguridad que vive el distrito a la “falta de compromiso de los funcionarios de seguridad”: “no están comprometidos con la sociedad, son electos para un cargo y después se olvidan de la responsabilidad que tienen o para qué fueron elegidos. Es una conjunción de leyes, falta de móviles, personal, organización y falta de compromiso”.
Por otra parte, hizo referencia al ataque a un adolescente el lunes que por un “desperfecto técnico” en las cámaras, no pudo recuperarse la filmación de lo ocurrido. “Con el tema cámaras, cuando se buscan las imágenes casi siempre está rota o no funcionan. Creo que deberían tener expertos en cámaras controlándolas, en caso de que no los tengan porque es importantísimo monitorear, para eso están”, dijo. Asimismo, hizo referencia al corredor seguro en donde ocurrió el ataque, donde debía haber un móvil.
Dejar un comentario