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Así lo expresó Graciela Odato, una de las principales disidentes que ahora integra el espacio de José Molina, a quien señaló como “el único referente del kirchnerismo en Pilar”. Por su parte, Rubén Romero, indicó que “estos últimos tiempos no se sentían reconocidos por la gestión del Intendente”.
En la mañana de hoy, históricos referentes del zuccarismo presentaron su renuncia al Jefe Comunal. Se trata de los hermanos Luis y Graciela Odato, esta última secretaria de Política Institucional. También se marcharon Rubén Romero, titular de Defensa Civil y Claudio Sánchez, delegado municipal.
Los disidentes formalizaron la partida del Ejecutivo con una conferencia de prensa que se brindó en el local del sciolista José Molina, ubicado en la calle 11 de Septiembre. En este contexto, Odato indicó: “Ayer (por el domingo) se lo comunicamos al Intendente y nos aceptó la renuncia. También hay compañeros en el Municipio que nos van a acompañar, prácticamente todos de mi agrupación (Nueva Generación). El Intendente me aseguró que les va a respetar el puesto de trabajo”.
La noticia no tardó en generar revuelo en las redes sociales y en otras esferas interpersonales donde los ex zuccaristas fueron tratados de traidores. A estas acusaciones, Odato respondió: “No jugamos a dos puntas, no somos traidores. Por eso tenemos el apoyo de toda nuestra agrupación. Los traidores se quedaron adentro del Municipio”.
La ex secretaria privada del Intendente explicó que el detonante fue el reciente pase de Zúccaro al Frente para la Victoria. En este sentido, indicó que José Molina es el único referente del kirchnerismo (y de Daniel Scioli) al que reconocen.
“Lo mío es una decisión netamente política. En lo personal, solo tengo agradecimientos para el Intendente. Él me había llamado la atención por faltar a dos actos así que pensé que ya era hora de tomar la determinación. Estimo que esto ayudará a los otros compañeros a dar el salto”, resaltó al aire del programa radial “La Mañana de Resumen” de FM Del Sol (91.5).
Por otra parte, Odato destacó que uno de los puntos que más los alejó de la actual administración municipal fue “el destrato a los trabajadores, lo sentimos de parte de gente que es muy cercana al Intendente, eso nos duele en el alma, no lo podemos soportar y nosotros en todas las áreas nos sentimos abandonados, a la deriva, como si no existiéramos”.
Para darle mayor base a las palabras de la ex funcionaria, Rubén Romero, otrora titular de Defensa Civil, afirmó sentirse como "un cuatro de copas”, y agregó que “hoy no se respeta a los militantes. No somos reconocidos en nuestro trabajo, tenemos un solo móvil en doce años, no tenemos una sede como la gente. No nos sentíamos parte de la gestión en este último tiempo. No estábamos cómodos ni éramos reconocidos”.
“Pedimos durante años por un centro de evacuados y cuando lo hicieron, se lo dieron a la UMGE para que lo maneje Carmen Zúccaro”, explicó a la prensa Romero.
Otra aseveración de Odato y Romero fue que “nunca se nos consultó a los militantes cuando se pasó al massismo, ahora tampoco con la vuelta al Frente para la Victoria” y recordaron que “en gobiernos anteriores, como el de Sergio Bivort, fuimos castigados, perseguidos y hoy Bivort está de nuevo en este municipio”, en referencia al Intendente que antecedió a Zúccaro y encargado por estos días del área de Defensa del Consumidor.
En tanto, el precandidato por el sciolismo, José Molina, avivó las llamas del alejamiento al agregar que “el Intendente recién ahora promete agua y cloacas”. “¿Por qué no firmó antes con Aysa, en 2013, cuando le llevamos el proyecto? En el distrito no se gobierna para la gente. Fíjense lo que está pasando en los hospitales y en salas de atención primaria”, sostuvo.
A su vez, en cuanto a los empleados municipales que adhieren a su proyecto, les pidió “que no renuncien a su cargo, den la pelea desde adentro, piensen en sus familias”.
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