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El senador bonaerense Jorge D’Onofrio aseguró que el alejamiento de Giustozzi y Cariglino se debió a la aspiración personal de cada uno a ser candidato único a gobernador por el massismo. “Las explicaciones las tendrán que dar ellos en el futuro”, señaló.
En los últimos días el tablero político renovador se ha acomodado en función de las deserciones de dos importantes dirigentes de sus filas, Darío Giustozzi y Jesús Cariglino. El senador Jorge D’Onofrio señaló que el pase se debe a las aspiraciones personales de ambos a ser candidato único a gobernador, y que el salto no afectará la intención de voto de Sergio Massa.
“Tiene que ver con las aspiraciones personales de cada uno y no con la actualidad política del Frente Renovador. Tanto en el caso de Darío Giustozzi como en el de Jesús Cariglino pretendían ser los únicos candidatos a gobernador por el espacio, y no aceptar las reglas de juego que tiene que ver con enfrentar las PASO en agosto próximo”, declaró el presidente del bloque massista en la Cámara de Senadores de la provincia a La Mañana de Resumen (FM Del Sol 91.5).
“Esto no cambia la intención de voto que pueda tener Sergio Massa, muy por el contrario”, añadió D’Onofrio.
“Las explicaciones las tendrán que dar ellos en el futuro, pero es muy difícil explicar cómo alguien se siente maltratado u hoy se da cuenta de que Sergio Massa no tenía la experiencia suficiente después de que justamente nos negáramos a la extorsión de que si no eran el único candidato se retiraban del espacio. Yo me pregunto, si hubiéramos accedido, si Massa sería (para Giustozzi y Cariglino) una persona con muchísima experiencia y nunca los hubiésemos maltratado”, indicó el referente del Frente Renovador en ese sentido.
Quien argumentó que a Massa le falta experiencia fue Giustozzi, el último en dar el portazo. “Yo creo que a Sergio le ha faltado experiencia y eso genera desconfianza. A eso se suman las desconfianzas derivadas por el mal clima interno que se vive a veces. Hoy no parecemos ser renovación", dijo en una entrevista a Clarín al tiempo que agregó que "en el massismo hay algunos personajes nocivos, perversos y con influencia creciente y que hacen que yo no pueda estar un minuto más en un espacio así. El cinismo y la hipocresía no las tolero. Prefiero el ostracismo político antes que perder mi dignidad", y expresó sentirse “decepcionado de tantos errores y contradicciones”.
Previamente se había producido el alejamiento del jefe comunal de Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino. La mesa de intendentes del Frente Renovador determinó la decisión luego de un acercamiento del malvinense al macrismo. Al respecto, José Eseverri apuntó contra aquellos que “vinieron al Frente Renovador a morder un carguito”. Días antes, el senador provincial Roque Cariglino había informado a Télam que “irse del massismo es una posibilidad” y que su hermano “no va a ser segundo de nadie”, en referencia a un posible puesto a vice de Francisco de Narváez.
Por otro lado, distintos integrantes del kirchnerismo dejaron entrever que le abrirían las puertas a Giustozzi para que se reincorpore al Frente para la Victoria. En cuanto a Cariglino, si bien no se oficializó el pase al partido amarillo, ya entabla conversaciones con referentes del Pro.
Lo cierto es que estos no son los primeros dirigentes en abrir la masiva fuga del Frente Renovador. Los antecedieron el intendente de Escobar, Sandro Guzmán, quien volvió al Frente para la Victoria y el de San Isidro, Gustavo Posse, quien se acercó al PRO.
“La gente hoy nos quiere escuchar hablar acerca de cómo le vamos a solucionar los problemas concretos y cotidianos que tienen, y no hablar de los problemas de los dirigentes”, finalizó D’Onofrio.
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