Juan Martín Tito: “Una hora en el club es una hora menos en la calle”

El joven dirigente social apunta a los clubes de barrio como una pata fundamental a la hora de educar a los más chicos, ganando amistades, salud, y alejándolos de los malos hábitos. El dirigente social Juan Martín Tito volvió a expresarse en relación a la importancia de los clubes de barrio y la educación de los más chicos por medio del deporte, una herramienta más que noble para atacar los malos hábitos que continúan creciendo en las calles. Al respecto, el joven pilarense sostuvo que “a los clubes de barrio les falta mucho y esa es la realidad. Es algo que no tiene que ver nada con la actual gestión, ni la anterior, sino que data de muchos años donde nunca hubo una política fuerte sobre ellos y su importancia en la sociedad”. En tanto, agregó que como ya ha mencionado en muchas ocasiones, “los clubes de barrio no son un gasto sino una inversión. Si se invierte en ellos se genera una mayor educación, más inclusión, amistades y salud, que luego repercute en todos esos ámbitos”. La idea de Tito apunta a que el deporte es un importante medio para educar a los chicos, y señala que “lo más importante es que la gente deja de estar en la calle. Una hora en el club es una hora menos en la calle, y la realidad es que la gente cuando está en la calle suele agarrar los malos hábitos”. “Estoy todos los días en los barrios, los recorro y se ve que una vez que se agarran malos hábitos desde chicos, es difícil largarlos”, expuso, y añadió: “Por eso, se necesita de una política de Estado que se base en los clubes de barrio, ayudando con el mantenimiento y brindándoles materiales deportivos o capacitando dirigentes, pero también yendo a lo profundo como brindarle a los chicos una buena alimentación, porque algunos van a jugar y no desayunaron o no tomaron la merienda, y la realidad es que no pueden hacer bien un deporte si no están bien alimentados”. Finalmente, el dirigente habla de la contribución de la gente en general, explicando que se necesita el aporte de tiempo y esfuerzo para aportar un granito de arena con la causa. “La importancia de los clubes de barrio, sobre todo en Pilar, es muy grande. Hay que darles prioridad, y desde mi parte siempre voy a estar colaborando. Le prometí a la gente que nunca les voy a soltar la mano. Y a quienes quieran contribuir siempre les digo que traigan ideas para poner en práctica y no importa si se equivocan y hay que volver a empezar. No me molesta que la gente venga al club y haga algo y se equivoque, lo que me molesta es que critique y que nunca lleven a la práctica algo que es difícil hacer”, concluyó.