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“Van a tener que dejar todo en la cancha para ganarme” y “mi límite sigue siendo el amarillo” fueron algunas de las declaraciones de Zúccaro tras la apertura de sesiones.
Tras concretar la apertura de sesiones ordinarias del HCD y ante una multitud de simpatizantes que coreaban “se ve, se siente, Zúccaro intendente”; el Jefe Comunal se mostró mucho más eufórico que en la presentación que acababa de cerrar.
“No quiero criticar a mis adversarios. Les deseo mucha suerte y no los veo como enemigos. Uno va madurando y aprende que el orgullo no sirve de nada y a Pilar lo sacamos adelante trabajando todos juntos”, fue el primer mensaje del Intendente muy similar al que usó para concluir su discurso en el HCD.
Pero la fervorosa hinchada zuccarista pedía más. “Si me quieren pegar, que me sigan pegando todo lo que quieran, porque este cuerpo tiene balas. Uno gana caminando y hablando con los vecinos. Uno tiene para demostrar hechos, no palabras”, sostuvo el mandatario.
“Estoy seguro de que vamos a ganar. Nos quedan cinco años para seguir trabajando, para continuar haciendo. Sabemos que tenemos deudas que vamos a saldar y vamos a trabajar por el pilarense como siempre”, dijo eufórico Zúccaro.
“Quisiera saber qué hicieron esos que tuvieron un puesto provincial. Qué hicieron por Derqui”, lanzó en un claro mensaje a su contrincante, el sciolista José Molina.
Ante los rumores que habían circulado sobe un posible salto al PRO, Zúccaro señaló: “Mi límite sigue siendo el amarrillo”. Además, ratificó su apoyo incondicional al peronismo y disparó contra aquellos que “vendieron a los compañeros de la militancia porque un gremio les puso plata”.
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