Campagnoli impulsa un Sistema Penal Juvenil integral

Muchos de los delitos que suceden en Argentina son protagonizados por menores de edad. A partir de esto, el Gobierno quiere bajar a 13 años la edad para imputar a los menores. Por ello, la diputada Marcela Campagnoli se sumó a la discusión sobre la baja de imputabilidad mediante la defensa de un proyecto que va más allá de reducir la edad penal. Según Campagnoli, la disminución de la imputabilidad por sí sola no soluciona el problema de fondo. En su intervención, resaltó la propuesta de su espacio, representado desde 2003 por Elisa Carrió, la cual contempla la creación de un Sistema Penal Juvenil.

Este innovador proyecto tiene como objetivo establecer un marco en el que los menores puedan ser investigados, defendidos y sancionados de forma adecuada. Se plantea un régimen de penas progresivas y la implementación de alternativas a la prisión, incluyendo alojamientos en establecimientos diseñados específicamente para facilitar la reinserción social. La propuesta también prevé un control estatal riguroso sobre la aplicación de las sanciones, asegurando así un tratamiento más humano y formativo para los jóvenes.

Además, Campagnoli lamentó que el primer contacto del Estado con un menor se dé a través del sistema penal, subrayando la necesidad de que las políticas públicas aborden también áreas fundamentales como la educación, la infraestructura, el esparcimiento y la salud. Según la diputada, la carencia de políticas integrales en estas áreas contribuye a que el delito se convierta en un atajo para muchos jóvenes, especialmente en la provincia de Buenos Aires.

Durante el transcurso de 2024, se analizaron distintos proyectos con la participación de diversos expositores. La iniciativa impulsada por la Coalición Cívica ARI ya cuenta con el aval de la Red de Jueces Penales de la Provincia de Buenos Aires, lo que refuerza su relevancia en el debate legislativo. Por eso, Campagnoli también advirtió que, si el Ejecutivo intenta imponer su propia propuesta sin abrir el espacio al diálogo y a las modificaciones, resultará complicado construir consensos necesarios para la aprobación de una ley que verdaderamente transforme el sistema penal para menores.