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El concejal del Frente Pilarense mostró su preocupación por los conflictos que la medida puede traer en los sectores vulnerables. Los nuevos montos en el abono de la boleta de gas fueron anunciados esta semana por el Gobierno Nacional.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), más del 40 por ciento del salario se destina al pago de los servicios públicos, incluido el transporte que aumentó a partir del 1 de febrero pasado. En este contexto, los usuarios mostraron su malestar frente al incremento –a partir de abril, también del 40 por ciento- en la tarifa del gas dispuesto por la administración de Mauricio Macri a través del ministro de Energía Juan José Aranguren, y quien se sumó a la crítica frente a esta medida no fue otro que el concejal del Frente Pilarense Federico Achával: mediante un comunicado, manifestó su preocupación porque la gente “tenga que elegir qué pagar” ante la pérdida de poder adquisitivo.
“Venimos caminando por muchísimos barrios y comercios en los que el vecino ya nos hablaba de sus complicaciones para llegar a fin de mes. Con estos aumentos, directamente nos plantea cambios en sus hábitos: dejar de lado el asado familiar, elegir qué día de la semana comer carne o pollo o buscarle una alternativa a la calefacción”, aseguró el edil sobre la percepción vecinal en las diferentes recorridas que realiza. También, sugirió que con esta determinación, se genera “una mayor precarización” en los hogares.
Achával consideró que esta situación “es muy difícil” porque, a las tarifas del gas, se le suman “incrementos en los boletos de trenes y colectivos y las cuentas de luz que superan los 8 mil pesos al mes”. Además, sostuvo que esta decisión del Gobierno Nacional “genera mucha incertidumbre respecto de cuál es la lectura que el oficialismo hace de la realidad”, porque avisó que a la gente “cada vez le va peor”.
A raíz de esto, señaló que actualmente los ciudadanos “tienen que empezar a elegir qué pagar y con qué endeudarse”. Y comentó que, en una visita a la localidad de Presidente Derqui, un comerciante le comentó que ganaba “17 mil pesos mensuales” pero, ante la llegada de una tarifa de electricidad que alcanzaba los 16 mil, había tenido que elegir entre “el negocio o la economía familiar”, por eso decidió cerrar su local.
Por último, el concejal opositor se lamentó porque “en lugar de estar hablando de sueños, de proyectos y de cómo vamos a mejorar la educación o la salud”, el debate “siga estando referido a cómo hacer para poder llegar a fin de mes”. De todas maneras, ante la delicada actualidad que atraviesan muchas familias, propuso “continuar anclados en esa conversación “porque la situación es cada vez más triste y la incertidumbre, mayor”.
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