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Los tres utilizaban guantes y tenían el rostro cubierto. La entradera fue en la madrugada del lunes, mientras el dueño del hogar dormía.
El lunes por la madrugada una entradera tuvo lugar en una vivienda de Zelaya, cerca de las 4.30. Tres delincuentes ingresaron armados, encapuchados y con guantes, y luego de amedrentar al dueño, lograron darse a la fuga con lo robado.
“Fue en lo de mi papá, que está pegado a mí. Él estaba durmiendo y le golpearon la frente con un arma, lo ataron y le empezaron a pedir dinero, joyas, cosas de valor. Estuvieron cerca de una hora y media adentro los tres”, dijo en diálogo con Resumen, Denise Michieli.
La joven contó que los malvivientes revolvieron la vivienda por completo: “sacaron todos los cajones, tiraron todo al piso, no quedó mueble sin abrir ni revolver”. Asimismo, dejó en claro que su padre está fuera de peligro ya que si bien recibió golpes “fueron despacio, con el arma en la cabeza para despertarlo pero no fue violento”.
Los tres delincuentes se llevaron un televisor, una computadora, el celular, otros electrodomésticos y dinero. “Cuando encontraron plata fue cuando decidieron irse”, aclaró Denise y explicó que cerca de las 6 su padre pudo acercarse a contar lo ocurrido y fueron a realizar la denuncia.
“Los ladrones tenían un handy, no sabemos por qué, pero tenían eso. La policía no nos dijo mucho y en la zona no hay cámaras, nos la sacaron el año pasado. En agosto del 2018 tuvimos ola de robos y pedimos las cámaras, pero aún no tuvimos respuestas”, argumentó.
Además, Denise contó que la semana anterior habían robado una verdulería frente a la plaza en donde antes, había una cámara del municipio. “Siempre fue un pueblo, se dormía con la puerta abierta y hoy hay miedo, no se duerme seguro. Se intentan tomar las mejores medidas pero cada vez es más difícil, hay muchos hechos y cada vez más seguidos”, cerró Denise Michieli.
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