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Un hombre denunció que el viernes a la madrugada fue golpeado, tras que el SAP le secuestrara la moto. Desde el área aseguraron que se trató de un procedimiento de rutina. Le iniciaron un expediente en la Fiscalía por “alcoholemia y resistencia a la autoridad”.
Desde Prevención Ciudadana aseguran que el caso del hombre que denuncia haber sido golpeado por el SAP en un control vehicular se trata de un “procedimiento de rutina”, e iniciaron una denuncia en la Fiscalía contra el denunciante por “alcoholemia y resistencia a la autoridad”.
Juan Carlos Losada, jefe de Prevención Ciudadana, consignó que “se trató de un procedimiento de rutina como ocurre todos los fines de semana con el tema del alcohol y la droga”.
Sergio Rodríguez, de 32 años, denunció que el viernes a las 4 de la mañana efectivos del Servicio de Apoyo Policial de Pilar lo detuvieron en un operativo de control, en Ruta 8 y Belgrano. Le solicitaron la documentación de la moto y anunciaron que secuestrarían el vehículo porque se encontraba alcoholizado.
Rodríguez solicitó que le hicieran la prueba de alcoholemia, pero al no tener el alcoholímetro, se esperó a otra patrulla, que al llegar tampoco tenía el elemento. Entonces el hombre sacó su teléfono para avisarle a un amigo que lo esperaba que llegaría tarde.
En ese momento, y según el denunciante una mujer policía le arrebató el celular de las manos, y cuando intentó recuperarlo, otros efectivos lo golpearon en el piso, produciéndole la fractura del tabique y una lesión en un tímpano.
“El alcohol al volante genera estos resultados”, señaló al aire de La Mañana de Resumen (FM 91.5) Losada, quien evitó dar precisiones acerca de si los agentes tenían efectivamente o no el alcoholímetro para comprobar que Rodríguez realmente hubiera consumido alcohol esa noche.
“Hay, con respecto al denunciante, un procedimiento hecho con intervención de la Fiscalía local por alcoholemia y por resistencia a la autoridad”, añadió el titular de Prevención Ciudadana. Por su parte, Rodríguez anunció que realizaría ayer la denuncia en Benavídez.
Mientras, los efectivos denunciados siguen en funciones, a menos que luego las autoridades determinen lo contrario. “Todo el mundo está en todo su derecho de denunciar. Será el resultado que la Justicia decida”, expresó Losada.
Según el relato de Rodríguez, tras la golpiza los agentes lo trasladaron esposado al Hospital Sanguinetti, donde no lo revisaron y solo firmaron papeles del SAP.
“Tengo que dar la tranquilidad a la gente para que siga trabajando de la manera en que venimos haciéndolo. Todo el mundo tiene la conciencia tranquila en el cumplimiento del trabajo, se hicieron todas las medidas que correspondían en este caso, como en tantos casos que ocurren en los últimos años. Es una de las dificultades que tiene esta tarea”, consideró Losada.
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