Cuatro ladrones encapuchados robaron en la casa de la madre de conocido dirigente

El hecho ocurrió en la tarde-noche del pasado miércoles en el predio que la familia de Gustavo Yacopi habita sobre ruta 28. Cuatro ladrones ingresaron a la casa de la octogenaria y la amenazaron diciendo que tenían de rehén a su hijo. Un grave hecho de inseguridad vivió la madre del reconocido dirigente de bomberos voluntarios de Pilar Gustavo Yacopi, cuando cuatro individuos ingresaron a su casa con intenciones de robo. El hecho ocurrió el pasado miércoles pasadas las 19, en el predio donde reside la familia del presidente de la entidad de servicios pilarense. La vivienda de la señora de 81 años, está dentro de un predio de grandes dimensiones donde en otro sector tiene su casa Yacopi y su familia. El propio dirigente brindó detalles de lo ocurrido en el programa “La Mañana de Resumen” de FM Del Sol. “Según me comentó mi mamá, alrededor de las 7.15 de la tarde, había mandado al casero que tenemos contratado a comprar pan -relató Yacopi- salió en moto y aproximadamente quince minutos después estuvo de vuelta con el encargo de mi mamá. Ingresó al lugar y cuando se dirigía a la casa de mi madre fue interceptado por cuatro individuos encapuchados que lo obligaron a abrirles la puerta. Una vez adentro amedrentaron a mi madre diciéndole que le entregara todos los valores que hubiera en la casa porque me tenían de rehén a mí y a mi familia en la otra casa, que está a unos 70 metros de allí, dentro de la misma propiedad”. Una hora y media interminable Mientras esto sucedía, llegó de Pilar la esposa de Gustavo Yacopi, que sin sospechar nada de lo que ocurría en la casa de su suegra, ingresó con el auto hasta su vivienda. A todo esto, Yacopi se preparaba para salir a una reunión de Rotary Club en el centro de Pilar. “Me terminé de cambiar y habré salido pasadas las 20 de mi casa, por supuesto sin saber nada de lo que estaba pasando en casa de mamá -relató el presidente de Bomberos en la entrevista radial-. Llegué a la reunión y puse el teléfono en silencio para no interrumpir la charla, por eso no escuché que pasadas las 9 de la noche, mi familia preocupada me comenzaba a llamar”. Asimismo, los ladrones impunemente continuaron con su faena de revisar cada rincón de la casa de la octogenaria en búsqueda de valores. “En síntesis le sacaron algo de plata que tenía mi mamá, algunas alhajas y se llevaron dos televisores –resumió Yacopi–. Los malvivientes se fueron a eso de las 9 de la noche, porque diez minutos después me entró el primer llamado de mi madre al celular, que no contesté porque no lo escuché. Mi hermana entonces se comunicó con el comisario Adrián Spen de la Pilar Primera que rápidamente encabezó un operativo del cual participaron móviles y personal del CPC, el SAP y la propia comisaría. También intervino el secretario de Prevención Ciudadana Losada que logró comunicarse conmigo”. En esa situación, Yacopi dejó la reunión. “Una vez que me cercioré del buen estado de salud de mi mamá, nos fuimos a recorrer con personal policial el cerco perimetral que da hacia la ruta, encontrando un lugar donde los ladrones habían cortado el alambrado para ingresar al predio. De ahí dedujimos que ya estaban adentro del terreno cuando llegaba de hacer las compras el casero, al que redujeron y obligaron a abrirle la puerta de la casa de mi madre”, relató. Aunque nadie vio un vehículo en las inmediaciones, se están estudiando las imágenes de cámaras de seguridad que instalo el Municipio sobre ese sector de la ruta, para verificar si los ladrones contaron con algún móvil de apoyo para su faena delictiva. Consultado Yacopi sobre qué medidas de seguridad tomará de ahora en más para tratar que no se repitan hechos de esta naturaleza, confesó estar realmente perplejo y con cierta impotencia. “Uno toma en su casa todas las medidas de seguridad que se piensa serán suficientes para prevenir un ilícito, pero poco se puede hacer ante una “entradera” o “salidera”, es muy difícil prever que puede pasar cuando uno llega o se va de su casa”, reconoció. Algo que le llamó la atención al dirigente bomberil, fue la supuesta certeza de que los ladrones lo conocían y sabían que vivía en el mismo predio donde reside su madre. “Es llamativo el hecho que le dijeron a mi mamá que me tenían de rehén. Esto da a pensar que algún dato tenían y sobre esto está trabajando la policía en la investigación del robo”, cerró.