Miércoles 15 de Octubre de 2025
Homicidio en La Alborada

Condena al femicida: "Denise ya no está más, pero yo soy su voz"

Cinthia, madre de la adolescente asesinada en Derqui en noviembre de 2024, expresó su indignación tras la confirmación de la condena a 15 años de prisión para N.G.F., acusado del femicidio de su hija. Denuncia encubrimiento y negligencia por parte de la familia del agresor.


  • Martes 14 de Octubre de 2025
Femicida Denise

La confirmación de la condena a 15 años de prisión para N.G.F., acusado del femicidio de Denise Abril Pazos Giménez, de 16 años, en noviembre de 2024 en Presidente Derqui, dejó sentimientos encontrados en la familia de la víctima y marcó un antes y un después en la vida de quienes la conocían. Su madre, Cinthia, habló con Resumen y relató en detalle la experiencia del proceso judicial, la pérdida y la indignación que siente frente a la sentencia.

“15 años no es nada. Mi hija no es 15 años. Tenía toda una vida por delante: iba a estudiar la carrera universitaria que había elegido, tenía sueños, planes, y ahora nada de eso podrá cumplirse”, dijo con visible dolor. Para Cinthia, la pena resulta insuficiente frente a lo ocurrido y al daño irreversible que sufrió su hija.

La madre recordó también la manera en que la familia del agresor intentó silenciarla durante todo el proceso. “A los dos días de la muerte de mi hija, me pusieron un bozal para que no hablara con los medios. Me citó un juez y me dijeron que no podía expresarme, porque el acusado era menor y había que protegerlo. Yo recién ahora, al terminar el juicio, puedo hablar y expresar lo que siento”, relató.

Cinthia describió cómo la relación de Denise con el joven acusado estaba marcada por la manipulación. “Mi hija estaba totalmente manipulada por él. La madre del chico estaba al tanto de todo y nunca me comunicaba nada. Mi hija empezó a cambiar, ya no era la Denise que yo conocía. Su forma de actuar, su actitud, todo era diferente. Yo veía que algo pasaba y trataba de protegerla, pero estaba sola en esa lucha”, expresó.

La madre también denunció la responsabilidad de la familia del agresor en los hechos: “Luego de ser estrangulada estuvo en la casa entre dos y tres horas con los padres de él presentes, y no la asistieron. Incluso intentaron hacerla pasar por agresora, diciéndole a la policía que nosotros habíamos reaccionado violentamente. Esto no es cierto. Nosotros estábamos en shock, no hicimos nada de lo que nos acusaban. Fue una falta de sensibilidad total”.

Cinthia detalló además la dinámica familiar que, según su relato, contribuyó a la tragedia. La madre del joven, según Cinthia, no mostró disposición para comunicarse ni coordinar con ella como madre. “Yo le pedía hablar, tener contacto, porque si mi hija iba a su casa quería conocer a la familia. Pero ella me respondía con ironía, diciendo que no tenía turno para mí. Nunca mostró comprensión ni interés por mi hija”, denunció.

Sobre la sentencia, Cinthia manifestó su profunda indignación: “Los abogados pidieron 33 años, la fiscalía 22, y le dan 15. ¿Qué sociedad va a recibir a un psicópata? Este chico ya tiene todas esas características y su familia lo encubrió. No hubo arrepentimiento, ni reconocimiento del daño. 15 años no es nada frente a lo que le hicieron a mi hija”.

El proceso judicial, según Cinthia, también fue una experiencia marcada por la incomodidad y la injusticia: “Durante el juicio, los testigos del acusado mintieron, la madre del chico no habló, y yo me sentí impotente. Estuve siete meses en shock, esperando a mi hija cada día al portón de mi casa, y nadie me acompañó, nadie me cuidó. Mi hija fue víctima de un crimen y, al mismo tiempo, yo fui criminalizada por los padres del agresor”.

Cinthia recordó además el impacto que tuvo este hecho en la comunidad y en la escuela: “Al principio fue muy duro. La sociedad cuestionaba mi rol como madre, me decían que yo no cuidaba a mi hija. Pero la directora y los compañeros siempre estuvieron presentes, apoyándonos. Aun así, salir a la calle era un desafío: la gente opinaba sin saber lo que realmente pasaba en casa”.

La madre también remarcó la importancia de la protección parental y la confianza entre padres e hijos: “Que confíen en los padres. Yo, siendo madre soltera desde los 17 años, siempre hice todo lo posible por proteger y acompañar a mi hija. No recibí ayuda, nadie me escuchó, y aun así traté de cuidarla hasta el último momento. Mi hija merecía otra vida, y mi único pedido es justicia”.

El caso de Denise sacudió a Presidente Derqui y generó un debate sobre la aplicación de la ley penal a menores y la responsabilidad de los adultos en la protección de los adolescentes. Para Cinthia, la tragedia no termina con la sentencia: “Este chico va a salir a la sociedad a los 32 años, y temo que pueda hacerle daño a otra chica. Mi hija no es un papel, era una persona llena de vida, sueños y talento. No es justo, y por eso seguiré buscando justicia por ella”.

Dejar un comentario

Los campos marcados son requeridos *