Largas colas y críticas de vecinos tras la fuerte suba en las facturas de gas

Aseguraron que es la primera de una serie de tres subas establecidas por el gobierno. La quita de subsidios y el costo del gas importado impactaron en el monto total. Aconsejaron pedir la exención de este último cobro. Con el inicio del mes de agosto, las facturas correspondientes al servicio de gas comenzaron a llegar por primera vez, luego del anuncio del gobierno nacional que aumentaba la tarifa establecida y prometía importantes diferencias en los montos a pagar. En la jornada de hoy, un importante número de vecinos congregados en la sede de Gas Natural Fenosa rechazó de plano la medida, y reflejó los fuertes pagos que deben afrontar. En este sentido, el edificio ubicado en la calle Independencia, entre Ituzaingó y Rivadavia, recibió a los controvertidos vecinos que se acercaron a abonar sus facturas, o bien a realizar algún tipo de trámite respecto del importe. “El precio aumentó notablemente. A pesar de que me descontaron el gas importado la tarifa subió casi un 100 por ciento, y durante las próximas tres facturas seguirá subiendo porque son aumentos que autorizó el gobierno pero ajenos al gas importado. Es un disparate, pero es el resultado de la famosa década ganada de la que tanto hablan”, comentó un hombre. La exención del gas importado es una de las alternativas señaladas desde la Defensoría del Pueblo de Pilar, a cargo del doctor Orlando Bargaglio. El procedimiento se reduce a un trámite a realizar todos los bimestres en la sede de la prestataria, para que se descuente de la factura el importe del servicio, que en algunos casos supone entre una tercera parte y la mitad del valor total. Una vez efectuado el movimiento, el cliente abona la diferencia a la espera de un juicio que deberá fallar a favor o en contra de quienes solicitaron la exención. En caso de que el resultado sea adverso para los clientes, estos deberán abonar los montos correspondientes al gas importado que no pagaron. Sin embargo, otros usuarios destacaron que el aumento se siente más por una cuestión geográfica, y no por el incremento de las tarifas en sí. “La factura vino bastante más alta. Me parece que hay valores dispares dependiendo de la zona en la que uno vive, porque por ejemplo en Capital la gente paga mucho menos que en Pilar”, señaló una señora.