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SCIPA informó que el derrumbe en el primer trimestre del año alcanza “entre un 7 y un 8 por ciento”. Ferretería es el rubro más afectado. Inflación, suspensión de cuotas y quita de subsidios, principales motivos de la retracción del consumo.
El primer trimestre de 2014 no comenzó de la mejor manera para los comerciantes locales y, ante la escalada inflacionaria y la devaluación de la moneda, la incertidumbre económica afecta a las ventas.
El presidente de la Sociedad de Comerciantes, Industriales, Propietarios y Afines de Pilar (SCIPA), Daniel Castro, informó que, según sus estadísticas, las ventas en Pilar cayeron un 2,5 por ciento en marzo, por lo que se registra una baja de “entre un 7 y 8 por ciento en lo que va del año”.
Este porcentaje es resultado del relevamiento de SCIPA en cinco rubros: alimentos y bebidas, juguetería, indumentaria, golosinas y ferretería. Este último es, según la Cámara de Comercio, la actividad más afectada ya que sus ventas se desplomaron un 6 por ciento sólo en marzo.
“Lo de la ferretería es preocupante. Marca una tendencia de caída en los rubros de la construcción y las reparaciones. Y, como todo es una cadena, si el comerciante no tiene dinero no compra ropa o realiza actividades recreativas por lo que también se ven afectados los demás rubros”, explicó el contador.
Sin embargo, la caída registrada al 31 de marzo por SCIPA es inferior a la presentada por la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME) que había anunciado que la baja en la actividad el mes pasado había sido del 7 por ciento.
“Teníamos esperanzas que marzo mejorara, pero no fue así. Ahora ya subieron los combustibles de nuevo y eso genera una espiral inflacionaria sin control”, subrayó.
“En lo último que deja de gastar la gente es en alimento, pero se está construyendo mucho menos y se dan menos lujos. La inflación está comiendo el bolsillo de los usuarios así que tienen que obviar ciertas compras”, señaló Castro.
“Según los datos de economistas privados, la inflación a fin de año va a acumular un 40 por ciento así que habría que ver las medidas que aplica el gobierno para impulsar el consumo, el cual decreció considerablemente en comparación con el 2013”, amplió.
Castró también explicó que el impacto de los aumentos de sueldo que se están cerrando en las distintas paritarias sectoriales –alrededor del 30 por ciento- dependerá de la inflación. Y agregó que otra problemática es la quita de subsidios al gas y, eventualmente, a la electricidad.
“Así los trabajadores consigan aumentos, si se quitan los subsidios, significaría subas de un 100 por ciento. Eso hace que el dinero que podía gastar en ferretería o recreación, lo va a destinar a luz y gas. Eso bajará la demanda”, vaticinó.
Castro podría ser reelecto presidente de SCIPA
Tras la última reunión de Comisión Directiva, los miembros de SCIPA habrían decidido que el contador Daniel Castro continúe dos años más al frente de la entidad, en caso que para la asamblea de autoridades del 24 de abril no se presente una lista opositora o, en ese caso, si resultara favorecido por la elección.
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